BON JOUR, TRISTESSE...

 Resultado de imagen de comunistas y fascistas

…De François Sagan . Esto es una reflexión a toro pasado.-  Hubo jornada de reflexión en Francia y volvió el sentido común a las urnas. Pero consuela poco. Es un desconsuelo pensar que existan partidos y partidarios fascistas, nacionalistas y populistas en un país civilizado como La France. No es que sean de izquierdas o derechas, es que son profundamente antidemocráticos, pues se sirven de la democracia para destruirla. Son gentes fronterizas, periférica, por su deriva totalitaria y su profundo arcaísmo. Pero aquí están, en toda Europa. También en España, también…

                …Y Europa respiró aliviada porque es Macrón el elegido de los dioses comiciales. Y eso está bien, y debemos alegrarnos todos. Pero haríamos mal en olvidarnos que el segundo partido más votado en la casa vecina, el principal partido de la oposición, va a ser a partir de ahora una formación que practica la xenofobia, el aislacionismo el antieuropeísmo y el más descarado fascismo. Y eso es un muy mal resultado, muy malo… Y deberíamos preocuparnos todos.

                Al día siguiente de que Macrón recibiera las bendiciones, a Rajoy le faltó tiempo para revestirse a sí mismo del liberalismo macroniano. Je suis le macrón espagnol, se apresuró a soltar a los cuatro vientos. Pero nada más falso e impostado. Ni más alejado de la realité… Si aquí existe una paridad con Macrón, está en Ribera. En juventud, en talante, en postulados, en formas y maneras, y en cierta y relativa limpieza, porque aún no están ensuciados por la corrupción. De momento, al menos.

                Nuestro podemítico fascismo de izquierdas ha saludado el resultado con su asco habitual: “son unos banqueros”, ha soltado uno de la troika… Ya, al menos no son unos “maduros”, voy y suelto yo. Lo malo de esta gente es que carece de la más elemental inteligencia ética. Creen que porque los partidos institucionales han defraudado en la recta final de su andadura, resulta honesto aliarse, tapar, justificar y aliarse con cualquier tiranía de cualquier signo, aunque sea la opuesta. Ahí tienen a Melenchón de Bullas, haciendo el Don Tancredo ante Le Pen y favoreciéndola descaradamente.

                Los números paridos de tal barbaridad es que la tercera parte del voto en Francia ha sido fascista: un 34% para ser precisos, aupado por una gran parte del voto de izquierdas. Ese es el legado. Y eso es lo esperado… aquí, dans notre L´Espagne, aussí… Pues la extremista izquierda está aplicando idéntico manual estratégico. Menos mal, ya digo, que tenemos un Albert Rivera al que agarrarnos llegado el caso. De momento, les/nos han puesto un espejo al otro lado de los Pirineos, en el que mirarse y en el que mirarnos, y en éstas las nuestras, el reflejo del espejo es importante, dado lo que nos jugamos.

                Espejo, espejito mágico… ¿quién es el más tonto del reino?, ¿aprenderemos o desbarraremos?.. A ver lo que hacemos. Cuando pasen los fastos y vengan los efectos, y el alma se serene, leámonos Le Pont Mirabeau, del gran y buen Apolinaire. Quizá nos diga algo. Mientras tanto, bon jour