CONSUMATUS EST

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  • Ítem Misa est… reza el oficiante… - Demos gracias a Zeus, contestan los fieles… Sánchez es el Zeus de sus parroquianos, y pase lo que pase, que pasará, no lo duden ni por un solo instante, de momento ha terminado con un “impasse” que estaba perjudicando a todo el país, al tener un Estado inmovilizado, paralizado por una funcionalidad excesiva. Había que mover ficha, y no se puede mover de otra forma ni manera que como se ha hecho, ya que los partidos de derechas y ultraderecha no han facilitado otra salida que esa misma, para así poder, encima, echárselo en cara. Maquiavélico, sí, y torpe y vulgar, también, pero así se ha hecho.

 

La representante de ER en el Congreso, con su franca y espontánea, también escandalosa (ha sido dicho así a conciencia), declaración parlamentaria: “Me importa un bledo la gobernabilidad de España”, en realidad no ha engañado a nadie, puesto que ha dicho con claridad meridiana, no exenta de sinceridad, lo que realmente sienten. Sin embargo, a los PP, VOX y Cs, sin decirlo ni admitirlo, más bien presumiendo de lo contrario, también les importa un comino la gobernabilidad de esa misma España, pues, de importarles, hubieran trazado puentes para haberlo impedido ofreciéndose ellos como socios de coalición. Y no lo han hecho porque prefieren perjudicar al país y beneficiar sus intereses estratégicos. No les importa el país. A ninguno. Solo que unos lo dicen y otros lo callan. Unos lo confiesan sin esconderse, y otros se rasgan las vestiduras y se dedican a escandalizar a la gente, pero tampoco les importa el país. Solo quieren gobernarlo ellos.

 

La burda simpleza del bloque de derechas es montar el viejo escenario del miedo: “traidores a España”, “han pactado con terroristas y separatistas”, “nos van a llevar al caos”, ya saben… Un escaparate patibulario. Pero, en el fondo, y lo saben aunque lo ocultan, ellos han apostado también por la ingobernabilidad de España para así poder justificar sus posturas extremas y ultras (de ultraje), e intransigentes. Así mismo funcionaba aquel tristemente famoso “búnker” que padecimos en la Transición… Sin embargo, lo genuinamente legítimo y democrático es respetar lo que permite nuestra democracia, y dejar que el gobierno, repito, democráticamente constituído, tenga su oportunidad. Tienen todo el derecho del mundo y el que les otorga las Leyes que todos los partidos se han dado, además, o sea, el permiso a desarrollar el programa político que crean conveniente. Lo contrario, es total y absolutamente antidemocrático, incluídos los sucios y tramposos métodos empleados por esta clase de oposición, que ni siquiera respetan el resultado de unas urnas…

 

Otra cosa, es que yo, personalmente, opine que este invento, desgraciadamente, va a tener muy corto recorrido, pues los socios de fortuna que se ha visto forzado a buscar, no tienen ninguna fiabilidad. Cero absoluto y bajo cero. Los de la UP son unos conversos de conveniencia, que moderan su discurso por lo que les conviene (el poder), que piden educación y respeto cuando ellos entraron como caballos en cacharrería – ya no se acuerdan – y que han demostrado su habilidad en apuñalar por la espalda. Pablo Iglesias ha recuperado sus maneras conventuales de padre abad, y está dispuesto hasta a hacer un bautismo-comunión-confirmación y asistir a maitines, si es necesario. Lo que haga falta, que “París bien vale una Misa”

 

…Y los de ER son inequívocamente separatistas y no se esconden. Dan la cara y lo dicen: van a chantajear al PSOE cuanto puedan para la consecución de sus fines. Sin los tapujos que usan los otros hipócritas, que hacen lo mismo pero no lo confiesan... Como ustedes comprenderán, con esa procesión ninguna Virgen puede hacer ningún milagro. Y yo creo que la legislatura va a ser corta, y que vamos abocados a unas nuevas elecciones. Sinceramente, así lo pienso. Pero ellos tienen el derecho a intentarlo y nosotros la obligación de respetarlo. Habrá que hacer un ejercicio de moral, quien la tenga

 

Otra cosa es que Pedro Sánchez lleve al desastre al Psoe, por su marcado cesarismo, ambición y oportunismo. Será el partido quién tenga que resolver esa papeleta. Un problema interno, al fin y al cabo. Sus votantes deciden a través de las urnas, y sus bases han de captar el mensaje. Cada cual tiene su propia responsabilidad. Y eso no se verá hasta las próximas, que yo creo que cercanas, elecciones. No es lo que quiero, es lo que me temo. No sé si me entenderán, o si querrán entenderme, claro…

Publicado por MIGUEL GALINDO SANCHEZ en 23:33

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