DEMOCRACIA Y DEMOCRATAS

El Constitucional prohíbe, como es natural, la tramitación exprés del referéndum soberanista catalán, una vez que han registrado en el Parlament la proposición de ley del autodeterminación unilateral (por nadie pase, todos sentimos lo acaecido últimamente a esa comunidad). Puigdemont declara estar dispuesto a ir a prisión antes que ceder en la convocatoria de votación soberanista. Quiere y desea jugar el papel de mártir/héroe, que es el más lucido de todos. Sin embargo, por otro lado, no respetan la voluntad de uno de sus pueblos, Batea, que desea ser aragonés y no catalán, como tampoco quiere devolver a Aragón las 44 obras de arte que se llevaron con malas artes del monasterio de Sijena (eran para exponerlas, y ahora no quieren restituirlas). Cataluña ens roba, dicen los maños. Como verán, un claro ejemplo de democracia y de dirigentes demócratas.

                Maduro proclama su victoria (falsa y falseada) mientras internacionalmente aumenta la condena, y mientras su Parlamento llama a continuar las protestas en la calle para no reconocer una Constituyente impuesta para el recorte de las libertades y acumulación del poder en una solas y únicas manos: las del presidente. Presidente que incluso quiere tomar el mando personal de la Fiscalía General, cuya titular critica el estado policial impuesto con que se gobierna este país. Así que ha sido destituída y es acosada y amenazada, teniendo que refugiarse en la vecina Bolivia. Un país dividido y secuestrado por un dictador. Como ven, otro claro ejemplo de democracia y de dirigentes demócratas.

                Sánchez replica a Díaz que está obligada a aceptar lo de la “plurinacionalidad”, porque, según su vicesecretaria general, “las resoluciones del Congreso de junio son de obligado cumplimiento”, cuando él mismo, que fue condenado en su día por su “nación de naciones”, dijo que “a ningún líder, ni siquiera territorial, se le debe imponer nada que afecta a sus conciencias”. Dos barajas, dos libricos, dos morales… Él mismo destituyó en su día a López y a Madina en una doble moral indigna. Como ven, otro ejemplo más de democracia y de dirigentes demócratas.

                Y todos y cada uno de estos pajarracos, Puigdemont, Maduro o Sánchez, se consideran demócratas puros y sublimes, y se permiten darnos lecciones sobre lo que es una democracia. Es muy curioso que Puigdemont y sus asnos quieran imponer por narices una burrada saltándose las leyes de la democracia a la que pertenecen, en nombre de otra falsa democracia. O que un Maduro se ponga a sí mismo como salvador y garante de la democracia, secuestrándola y destruyéndola, y asaltando las libertades y los derechos humanos. O que un Sánchez, que incluso se atreve a decir que en España se exagera en las críticas sobre el sanguinario Maduro, imponga sus intereses personales por encima de los de su partido e incluso de los del propio Estado, presumiendo de ser la auténtica democracia.

                Y estos tres ejemplos son los modelos queridos, deseados y aplaudidos por Iglesias y todos sus podemitas. Incluso esa formación, junto a Ezquerra Republicana y los de la Cup, se niegan a suscribir el pacto antiterrorista y, para colmo, presumen de no respetar la Constitución. Es tremendo. Resulta terrible. Lo he dicho varias veces. O nuestra, joven aún, e inexperta, democracia es despojada de toda democracia en su propio nombre por todos estos falsos y falsarios demócratas, o saldrá fortalecida de esta lucha. Nos esperan unos años apasionantes en que la ciudadanía de este país tendrá que ejercer de árbitro de la situación, y ser garante de sus propias libertades públicas. De nosotros depende.