EDUCACIÓN
- Por miguel-galindo
- El 14/03/2018
Cuando no existían las libertades, mi padre nos educó bajo aquel mantra de “tu libertad termina donde empieza la libertad del otro”. Y como fórmula de respeto era inmejorable. Y como método de comportamiento, es inmaculado. Y como máxima, incuestionable…
Pero en la actualidad habría que matizar algo. La libertad es como las aguas jurisdiccionales de los países, pero entre personas. Yo amplio mi zona de libertad a costa de otras costas, y luego exijo que se me respete. Eso hoy se ve mucho…
Colectivos que exigen respeto para sus fes y creencias, porque sienten invadidos sus derechos (aguas jurisdiccionales) pero no respetan el derecho de otros para opinar en libertad. Y es que aún no estamos educados.