EMPIEZA EL BAILE

 

    Lo de salirnos de Gran Bretaña promete mucho entretenimiento, la verdad… Vamos a tener muchas cosas que ver y muchos casos que comentar, durante un tiempo. Es lo que tiene una metedura de pata tan descomunal. Que provoca incomodidad, líderes que quedan descolocados, como pillados meándose en la pila bautismal, y todo eso… Ahora, el cafre del exalcalde de Londres, por ejemplo, tras el embolado de Cámeron, y a pesar de ser un brexista a lo brutus, se lava las manos en lo de la separación, se va, y alega no estar preparado, el tío…

                …Pero lo sabroso es el primer movimiento de la ministra principal de laescocía Escocia, que ha cogido los bártulos y se ha ido a ver a los de las coles (Bruselas) para tratar de seguir en la UE. Que a Rajoy le ha olido como a cuerno quemado, y le ha sentado fatal, y ha saltado como títere con muelle, diciendo que se opone, de entrada, a la re-entrada. En esto no se considera en funciones don Tancredo. Además, es tan espeso que no ve las grandes, enormes, diferencias, entre lo de Escocia y lo de Cataluña.

                Porque no es igual. Allí es un país federal que se ha salido de una comunidad continental, dejando también fuera a sus propios estados confederados, a sus royaume´s unie´s, five points (veremos a ver ahora en Eurovisión, gilipoils). Y, claro, éstos se sienten perjudicados. Pero aquí es distinto. Aquí es una comunidad autónoma que se quiere separar de un país que ya es miembro de pleno derecho de la CEE, queriendo, además, seguir perteneciendo a esa misma unión europea. La respuesta a un pueblo que ha sido privado de dicho derecho comunitario jamás puede ser la misma que a uno al que nunca se le ha privado de él, sino más bien todo lo contrario…

                Lo lógico y de sentido común es que al primero se le ampare en ese derecho del que ha sido despojado, y se vea con simpatía su desconexión como reino federado que es, y al segundo se le advierta que salirse de un estado miembro es salirse también del club del que se es miembro. No confundamos una expulsión (caso escocés) con una fuga (caso catalán), aparte lo que cada uno es, que no son lo mismo.

                Como tampoco es lo mismo el caso de Gibraltar, que también pide amparo y auxilio a la UE, pues se sienten igualmente expulsados del paraíso. El cabezo de los monos no tiene entidad para ser un país independiente, ni de coña, por lo que lo natural es aconsejarle que, si se siente tan perjudicado por su metrópoli, mande a su metrópoli a tomar por el recto… proceder, y se asocie con el país donde está ubicado e inserto su territorio, que es de donde, en definitiva, procede, y que, además, es miembro formal de esa misma Europa… ¿Capicci?...

                Enfín, lo que digo… Nos divertiremos bastante con estos brithis y otros tontish, sean o no sean todos englih… Como reza en el Quixotte: cosas veredes, amigo Sancho