ESTAMOS LOCOS

Hay un informe por ahí, de nuestra sanidad regional, en que se pone de manifiesto que un 20% de los murcianos (y eso es mucho, óigan) que acude a las consultas, es por un problema mental. Peripatético. Y sigue diciendo que el 27% de los pacientes tratados por dolencias físicas también tienen “síntomas condicionados por problemas mentales”... En fin, si, como afirma, “más del 15% de los españoles padecen alguna forma de ansiedad” (está sacado del mismo informe), quiere decir que en Murcia sobrepasamos la media española en coger moscas…

            Ya sé que para tratar este tema hay que prendérsela con papel de fumar. Estoy de acuerdo. Pero estos datos que maneja el SMS merecen que le echemos una pensadica al menos, digo yo… Un servidor cuenta con que la depresión y la ansiedad son enfermedades modernas, vale, de acuerdo, conforme… pero que en este jodío roal, que somos la almorrana de España, aún con todo el sol y playa y el Murcia qué hermosa eres y tu huerta no tiene igual, y todo eso, seamos los más depresivos y/o hipocondriacos, digo yo que será por algo, por alguna causa, por algún motivo que no cantan las excelencias de líricos y políticos, ¿no?..

            Lo cierto y verdad es que hemos catalogado una serie, casi interminable, de dolencias psíquicas, que antes no existían, o si existían, existían poco. Que si depresión, ansiedad, esquizofrenia, trastorno bipolar, estrés postloquesea, demencia, trastorno antisocial, y no sé cuántas chorradas, o no chorradas, más…

            Yo creo – y bien puedo estar equivocado – que nuestros abuelos y bisabuelos, nuestros ancestros más próximos, no padecían mucho todos estos malengues telúricos, porque su viaje vital era de menos a más. Venían de vivir peor a vivir mal, y de vivir mal a poder vivir un poco mejor, y de ahí, últimamente, a vivir de puta madre, incluso con una guerra civil de por medio, que tampoco es moco de pavo, pero que enseña a valorar las cosas un montón… Pero nosotros estamos empezando a conocer el viaje contrario, de vivir de cojón de mico a vivir tirando a regular y apuntando a peor. Y eso jode el seso, y con equis también, cosa mala…

            …Y de ahí tanta ida de bola. Yo identifico la depresión, y ustedes disimulen, con el miedo. Nos entra ansiedad cuando pensamos en que podemos perder lo mucho o poco que le hemos conseguido ganar a la puñetera vida. Nos hemos hecho a gozar, no a sufrir. Y nos deprimimos. Y actuamos hundiéndonos (depresión), o refugiándonos en la locura (demencia), o reaccionando con violencia (esquizofrenia), o dando bandazos desde los extremos (bipolar), u odiando cuanto se nos pone por delante (antisocial)… Y todo eso.

            Y que una forma de huir de la realidad es perseguir la fiesta contínua, una detrás de otra, como refugio atontador, que cuando acaban corremos al médico de cabecera porque estamos (nos ponemos) malitos… Y creo, fíjense, que eso es lo que nos pasa a los murcianos. Que somos los campeones psicosomáticos nacionales porque somos adictos a los placebos hedonistas. Y mientras el político no nos receta el panycirco, acudimos a que los del seguro nos receten píldoras. Y así vamos tirando. Y los de Salud Mental trabajando.