HEREDEROS DE LA HISTORIA

Resultado de imagen de D. JUAN MARCH

Toda Historia tiene sus historias. Nuestra historia más antecesor. La de la transición del franquismo a la actual democracia se hizo con unos inevitables flecos que, en vez de haber sido eliminados tras cuarenta años, no solo se han fortalecido, si no que se han hecho carta de naturaleza, a esa misma imperfecta – y aún por desarrollar en plenitud – democracia. A lo peor es por eso mismo cuánto está pasando.

 

            Por ejemplo: empresas cómplices con el franquismo, como Iberdrola, o Gas Natural, o la propia ACS de Florentino Pérez, entre otras, se lucraron gracias a la mano de obra en semiesclavismo, la prohibición de sindicatos y privación de libertades, a los monopolios y a las adjudicaciones millonarias en obras públicas… Sin embargo, tras ese período de dura dictadura, la mayor parte de sus altos cargos fueron fichados como consejeros delegados por empresas como Endesa, la nueva Iberdrola, Telefónica… todas las cuales cotizan en el Íbex 35 y son el mayor poder económico de la España actual. Sin haber pedido al menos unas mínimas disculpas por ello.

 

            Y es que el capital y el fascismo siempre han ido de la mano. El uno es socio imprescindible del otro. El banquero Juan March financió el golpe de estado del general Franco de cabo a rabo, y aunque el Caudillo, en compensación, solo permitió la creación de unos pocos bancos, afines al régimen, claro, y que se forraron a su amparo a cambio de que los altos políticos de la dictadura se forraran igualmente y acumularan gabelas entrando de consejeros en los mismos. Quod pro quod. Ahí tienen La Caixa, antíguo Banesto, Hispano luego convertido en Central Hispano, Santander… Exáctamente el mismo modelo siguieron las Cajas con respecto a los nuevos regidores autonómicos. Lo único en la actualidad es que la banca financia y ayuda a sus amigos políticos sean de la extrema que sea, en eso se han democratizado, pues los favores son los mismos. Ahí tienen, como ejemplo, esa extraña Caja de Ingenieros de Catalunya que le ha conseguido el superchalet proletario al internacionalista Pablo Iglesias…

 

            España, además, aún siendo un Estado Aconfesional según su Constitución, otorga privilegios sin cuento ni medida a la Iglesia Católica: la libra de impuestos, le permite financiarse con la casilla de la Renta de los españoles, le deja inmatricularse cuantos bienes anden sueltos por ahí, no le controla el dinero negro captado en los templos, les subvenciona centros concertados católicos, les paga sus profesores de religión en las escuelas públicas, les costea sus actividades… y mantienen un Concordato con el Vaticano, claudicante y vergonzoso. Fíjense si el franquismo y el catolicismo están unidos tan solo que en su Canal TV13, donde solo tienen cabida gente de orden: homófobos, ultranacionalistas, antiabortistas y antigenetistas, tertulianos de derecha extrema y extremosa, franciscanos de Vox y panegiristas del nuevo (por viejo) órden…

           

            Esta es la herencia histórica del franquismo, nuestro tic fascista enquistado en la genética de nuestra democracia. Se puede entender. Lo que ya resulta incomprensible es que hayan pasado más de cuarenta años del cambio y el doble del viejo régimen, y no hayamos eliminado todas esas corruptelas del poder… Incluso yo diría que las hemos guardado, conservado, protegido y asimilado. Hoy examina uno a los partidos políticos y a los políticos de los partidos, y nos damos cuenta que no sirven a ningún pueblo, mentira, ese es el cuento que usan, peo que sí se sirven de ese pueblo para sus medros.

 

            Unos lo disimulan, otros lo resucitan, otros tan solo le cambian la ropa… Pero son las mismas miserias y podredumbre farisaica de siempre…

 

 

Envíe su petición a miguel@galindofi.com facilitando su e.mail y le serán enviadas gratuitamente estas publicaciones