INCONGRUENCIAS

 

Por un lado se pone coto circulatorio en las grandes ciudades, con críticas y alabanzas para quien lo decide. Vale. Pero por otro se anima y bendice a que cada puente, cada fiesta, millones de coches salgan a contaminar. Luego, nos quejamos de la insanía ambiental de las urbes…

Y soltamos un discurso y su contrario sin despeinarnos un pelo. Consumismo y anticontaminación a un tiempo, y la gente haciendo suya tamaña incongruencia. Todo nos vale. No pensamos…

Además, no se nos ocurre subsidiar la compra de automóviles híbridos o eléctricos, no, lo hacemos con los contaminantes. No vemos que los impuestos que se cobran por el consumo de gasolina nos los gastamos en atención sanitaria… Hay que ser tontos…