INJUSTO, PERO PASA...

La policía detuvo a un sujeto, un esclavista, negrero, en El Raal. Había quitado los asientos a la furgoneta en que transportaba a "sus" inmigrantes para que así cupieran más. Los hacinaba, sin protección alguna, y les pagaba diez euros por jornadas de doce horas...

Esto existe. Como existen agricultores que contratan esta mano de obra, y empresas que la utilizan, eso sí, tapándose los ojos muy pudorosamente para no querer saber lo que pueda incomodar a sus conciencias...

Luego, seguimos demonizando a los inmigrantes, culpándolos de todo y por todo, de lo que pasa y de lo que no pasa... En pocas palabras: justificamos a los verdugos y culpabilizamos a las víctimas.