LA CLÁ

 

No nos moveraaaán… Sánchez (le faltó la guitarra) se atrincheró en Ferraz y llamó a los militantes diciéndoles que no fueran, a manifestarse como ellos solos saben hacerlo, que para eso están además de para llenar mitines…

Lo que hubo aquí fue una guerra civil por la marca PSOE. Están los que defienden la socialdemocracia constitucionalista y los que quieren devolver las siglas a un redivivo Pablo Iglesias reencarnado en podemita…

Pero activar la tecla callejera y coreográfica de la militancia sirve para intimidar a los de los papeles de reparto, y para guardar el fuego sagrado de las primarias. Porque los que al final deciden son los votantes, no los militantes. Parece que no quieren darse cuenta.