LA PATRIA

¿Cuál es el significado de Patria?.. Posiblemente que, si se consulta un diccionario, venga algo así como “el país o lugar donde uno ha nacido y al que se pertenece por vínculos jurídicos o históricos”. Esa sería la definición enciclopedista de la palabra. Pero si lo que se consulta es el sentimiento, la razón o el co-razón (vean que lo segundo tiene parte de lo primero), la víscera, las tripas del alma… es muy posible que nos salgan otras definiciones mucho más tribales. Al fin y al cabo, patria viene de patriarca, patrimonio, padre… y todo esto suele funcionar desde la sangre, según el tótem de cada tribu.

            Por eso mismo, que hay gente que su patria está en el anclaje genético, como otros la sienten donde residen sus más interesados intereses, por ejemplo, en el bolsillo. Otros en la selección nacional de fútbol, o de cualquier personaje o equipo que sude el escudo que lleva en la bien cobrada – por pagada – camiseta. Es el atávico sentido de la dependencia. La cosa funciona así: si éstos ganan gloria y honor, pues representan a la patria y yo soy patria también, pues igual gano yo como individuo compartiendo esa gloria y ese honor con ellos. Interesada identificación, se llama eso…

            Pero hay quién su patria reside en el aparato administrativo del ente superior que administra y suministra nuestras necesidades. O sea, en papá-estado. Otros que la ven en las tradiciones y costumbres de una sociedad, que fabrica sin parar costumbres y tradiciones de anclaje. Otros, la basan en la inapelable Historia, aunque se falsee esa misma Historia, y se inventen docenas de historias divididas e interesadas… Así se despedaza también la Patria en docenas de no menos falsas patrias…

            En esto se produce, al menos, un curioso fenómeno: Si soy patriotero (o patritario) de una patria escindida de una falsa patria, la mía, por la misma naturaleza, debe ser igual de falsa que la de la que me separo, ¿no?.. O, si por el contrario, mi historia es la auténtica y verdadera, la de donde procede no puede ser tampoco menos verdadera y auténtica… Y se produce la paradoja. Pero, sin embargo, el potaje de mil platos y mil cucharas, el patriotaje, no deja ver más que lo falso, no lo auténtico. Así que la Patria solo existe como invento eficaz en defensa de unos muy determinados intereses.

            Ustedes sepan perdonarme, pero ese es mi concepto purista de Patria. Todos los ciudadanos de todos los países del mundo se mueven a la invocación de la patria. De sus respectivas patrias. Cada cual de la suya, naturalmente. Una idea formada de retales de humanidad, pero siempre manejada por los que mueven los hilos del poder, que es a quienes realmente representa: el Estado, los gobiernos, el autócrata, los políticos, en definitiva. Lo que pasa es que éstos no suelen servir a la patria, si no que se sirven de la patria, y, por ende, de nosotros, puesto que, en realidad, nosotros somos “su” patria, y los servimos a ellos en nombre de la patria, pero en el fondo, los servimos de nosotros mismos.

            La Patria siempre ha sido el mejor negocio de los que mandan. La mejor mercancía para vender, pues todos están deseando comprarla. El mejor de los cebos para coger peces… Esas patrias se riegan con la sangre de infinitas personas, se plantan con el sacrificio de todos, pero solo unos pocos recolectan sus frutos. La patria, como la religión, es una gran idea, un fructífero invento. No obstante, cada cual tenga la suya… Mi patria está en el patrimonio de mi alma, en el de mi espíritu, donde nadie pueda meter mano ni cobrarse impuesto alguno para su medro y el de los suyos…

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 21 Febrero: LAS OTRAS VÍCTIMAS

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