LO SIENTO, PERO ASÍ ES...
- Por miguel-galindo
- El 18/02/2020
Ví en los… ¿informativos o desinformativos?.. a los propietarios-víctimas de la primera línea de la costa en el último – y primero de este calibre – temporal, que ha puesto al Mar Mediterráneo a formar olas de 8 y 12 metros, como si fuera el Cantábrico, y a mandarlas tierra adentro. No estamos acostumbrados a semejante comportamiento de nuestros mares. En La Manga, a poco que el oleaje venga bravo, ya la atraviesa por su escaso ancho, y se planta en el Mar Menor de un salto… También en el litoral interior de ese mismo mar chico ha arrancado de sus costas todas las playas artificiales superpuestas a su realidad natural. Y muchos se acordaban de aquellos cantiles que hoy hubiesen obrado, no sé, su efecto…
No diré yo tanto. Pero es curioso el espanto del que clama rabioso y reivindicativo por la pérdida o daño de su negocio o casa en primera línea de mar, de la que está tan orgulloso en su presunción. Y más curioso aún, el desahogo con que esa misma rabia se dirige “a quién corresponda” para tomar las medidas y esto no (me) vuelva a pasar… El clima, al que hemos cambiado a peor con nuestra propia mano y dedicación, no entiende de nuestras quejas, exigencias ni razones, que argüimos, y entre las que nos cobijamos. Algún día, quizá en la próxima borrasca, no sé, el mar nos escupirá a la cara las toneladas de plástico y basura con las que lo hemos envenenado, y seguiremos encarando a una administración que ya no puede hace nada por proteger nuestros intereses y chiringuitos…O es que, sinceramente, no nos damos cuenta, o es que nos asusta la realidad.
El otro día, en la siesta de la Siete, oí clamar a un pobre hombre: “No hay derecho… A ver cómo le hacemos frente a la Semana Santa, que, además, nos la vamos a cargar…”. No sé qué derecho esgrime ni a quién invoca por tal derecho, pero, por desgracia, las directrices de las autoridades climáticas de la Onu señalan ese mismo derecho como uno de los responsables, y como uno de los comportamientos que habríamos de cambiar para frenar parte del desastre al que se encamina el planeta. Pero es que la administración ya actúa en desbandada, casi está al gritar el “sálvese quien pueda”, pues el cambio la ha superado.
También se ha dicho y asegurado que estas borrascas, como las danas, crecerán en probabilidad y fuerza. Está garantizado, por desgracia. Y cada vez serán más violentas y abundantes. Es la respuesta de la naturaleza a nuestros ataques, y la naturaleza es ciega, y no entiende de derechos ni de reclamaciones. Es solo la Ley de Causa y Efecto, tan conocida pero tan poco respetada, y nuestra obligación, como supremacía humana (¿?), era haberlo admitido y obrado en consecuencia. Es lógico pues que nos quejemos, pero no es natural que protestemos… ¿A quién, o a quiénes?.. Solo nosotros somos los responsables de lo que nos pueda pasar. A mí, a ti, a él, a todos… Ya nada más que podemos lamentarnos y actuar en salvar lo posible, pero no sulfurarnos contra otros, que no tienen más culpa que nosotros.
Lo lógico y razonable es que empecemos a pensar en una posible respuesta al cambio que se nos avecina. En mudar el modelo. Lo inteligente es prepararnos para adaptarnos a lo que nos viene, no a perseverar en los mismos errores que nos ha llevado a esto una y otra vez, con la ceguera del que no sabe, o no quiere, ver lo evidente. Existe un modelo caducado, fracasado, que ha llegado al límite, y tenemos que aprender la lección e ir a nuevas fórmulas, sin empecinarse en las viejas… ¿Qué vamos a decir dentro de unos meses, cuando venga la siguiente, y vuelva a llevarse nuestro más-de-lo-mismo?..
Pido perdón por compartir lo que veo tan claro y sé que tan poco gusta… A veces no sé si debo parar, y dejar de escribir, y abandonar este día a día… Y a que quién quiera oír lo que desea oír decirle que lo busque en otra parte, y el que le interese lo que tengo que decir, que me busque, o me lo pregunte, simplemente, pues puede que no tenga derecho a clamar en desierto alguno al que no haya sido invitado en mis diarios tole-toles del demonio… Que, a ver por qué cohones me arrogo yo derecho alguno en despertar ninguna conciencia privada ni colectiva que lo que quiere es dormir sus propios y plácidos sueños de siempre…
Y me dan ganas de parar, detenerme, y escribir solo para algún luego, o para que lo devore el fuego. Como terapia para que el veneno actúe sobre mí despacio, bondadoso y certero… La memoria es algo que si no se consume fresca, se pudre. Y si la sirves en conserva, ya no vale para nada. No sirve para actuar, solo vale para engordar.-
MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 21 Febrero: LAS OTRAS VÍCTIMAS
Si quiere recibir gratuita y diariamente estos escritos en casa, facilite en miguel@galindofi.com su e.mail, y les serán enviados.