MAMANDURRIOS

Casado ha sorprendido con su propuesta de reforma para el nombramiento de los cargos del CGPJ, diciendo que lo mejor es que los jueces se elijan a sí mismos. Me ha dejado turulato (luego, rectificará matizando, sin duda)… ¿Qué esconde en la manga?. Los magistrados conservadores tenderían a elegir de los suyos, como los progresistas a sus afines, ¿no?.. El problema es que podría acabar siendo un órgano corporativo, no lo sé… y eso tampoco sería bueno del todo. Aquí, como en todas partes, el ejecutivo es quien quiere imponer a sus jueces, y en eso, Sánchez no está libre de tentación (encasquetó de Fiscal General del Estado a su ex ministra de justicia, Dolores Delgado, y se quedó tan pancho), y si es su socio Iglesias, que quiere manejar todo el espectro judicial… así que nadie puede dar lecciones a nadie de vaselina democrática.

Al final, aún con lo criticado que está, el sistema americano, va a resultar el menos malo, en el supuesto de que no haya ninguno bueno, claro… Sí, es verdad que, como aquí, son elegidos por el/los partido(s) en el poder. Sí que es cierto que sus cargos son vitalicios… pero, precisamente por eso mismo, las facciones partidistas no tienen ninguna garantía absoluta de nada. Un magistrado, al ocupar el puesto, recupera la libertad de la presión política, ya que no pueden ser movidos por deslealtad a nadie y pueden actuar con absoluta libertad de conciencia, sin ningún tipo de presión ni débito alguno. La última jueza fallecida, por ejemplo, entró a propuesta de los conservadores, y acabó siendo una entregada líder liberal…

El caso es que aquí, en España, en esto, como en tatas otras cosas, el desencuentro entre gobierno y oposición es una factoría de producir problemas, que tan solo paga el país y sus ciudadanos, porque, a la vista está, que a ellos tan solo les importa llevarse el gato al gua y aumentar y/o conservar su parcela de poder. Si nos fijamos, el grave conflicto con la Sanidad, con los Presupuestos, en Educación, o con esa misma Judicatura, es tan solo que más de lo mismo: a ninguno de nuestros políticos les importa un carajo la gobernabilidad de este país, lo único que les interesa es agarrar ese gobierno por ponedurías y hacerlo suyo. Nada más. Cuando alguna declaración pública de sus líderes parece tener sentido, solo es una pose para incautos… Y como la gente es como como el oso, que lo mueven al sonido de cualquier pandero…

Miren, si no… A Casado no se le cae del belfo el decirle al Psoe que con Podemos y Cía, no (a pesar de haberlos arrojado ellos mismos a sus brazos). Vale, de acuerdo… Pero es que Sánchez pide a su vez a gritos al PP que se desmarque de la ultraderecha y diga también no al fascismo. Pues ahora, aparentemente, lo ha hecho, así que ¿lo vá a hacer él, aunque también sea aparentemente?.. Fíjense ustedes la falacia de ambos líderes políticos. El cinismo que rezuman estos trileros con toda su cara dura. Lo del rechazo a la Ley Celaá de Educación es penosa. Muchas de las acusaciones vertidas en las pancartas no se ajustan a la realidad del texto de esa Ley, y la inmensa mayoría de los manifestantes y jaleadores de esas mismas pancartas, lo desconocen…

Como yo soy un simple, me pregunto, y les pregunto a ellos, y les pregunto a Vds. el por qué coño todo lo que se ofrecen y se solicitan en el parlamento, públicamente, condicionándose a soltar el rastre de sus rémoras extremistas, no lo cumplen de una puñetera vez y trabajan por España en los retos importantes que todos tenemos. Si la naturaleza del porqué hiere su sensibilidad, escojan vds. otra, carajo, puñeta, o la que sea, son muy libres… Eso sería un buen principio si en verdad quieren arreglar las cosas. Pero, lo que resulta imperdonable, es que ellos lo saben perfectamente. Es más, si nos preguntaran a la ciudadanía, estoy seguro que el mensaje sería ese mismo, y no otro… Pero si los capitostes no le hacen puto caso a sus propios barones de su propio partido…

¿Y, porqué no lo hacen?.. Muy simple, porque, de hecho, también se ayudarían mutuamente además de al país, claro, y no es eso lo que quieren ninguno de los dos. Lo que quieren es destruirse, y no mutuamente, si no subiéndose a la mula uno a costa del otro. Es lo único que en verdad les importa. No usted, ni yo, ni la abuela, ni la sanidad, ni la educación de los críos, ni la ruina que nos están buscando entre todos. No. Solo buscan sus puestos, sus sueldos, sus privilegios (eso es lo único que no se cuestiona ninguno ni entre ellos) pero, sobre todo, el poder…

Y el caso es que ese poder se lo facilitamos nosotros a través del paisanaje pasando por el urnaje… “Es que siempre son los mismos”, nos justificamos. Vale. Y nosotros también. Así que vamos a dejar de ser siempre los mismos y empezar a quitarles chupes y gabelas, sus prerrogativas, ventajas y mamandurrias, de sus ávidos morros… ¿Cómo?.. Hay formas y maneras. El caso es querer hacerlo.

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ - http://miguel2448.wixsite.com/escriburgo