MANÍPULI
- Por miguel-galindo
- El 22/04/2016
-Que usted manipule bien, amigo mío…
-Y usted que lo vea, querido cofrade…
…Es el díalogo a dúe que el PP regional y sus adláteres municipales mantienen entre sí con el objetivo de contaminar a la opinión pública en aquellos lugares donde perdieron su hegemonía política. Soltar el romano manípuli es ceder poder, y hay que hacer lo que sea y como sea para recuperarlo. De la forma y manera que sea… Aunque sea retorcer la realidad torticeramente.
El intento de devolver a la alcaldesa de Torre-Pacheco el bastón de mando, por el simple hecho de que no ha prosperado como delito la falta administrativa por la que se vió imputada, es la mejor muestra de ello. Se intenta que la gente confunda la parte por el todo, y que crean que a la exalcaldesa se le montó la moción de censura por el hecho aislado y concreto de su imputación, cuando eso es tan absurdo como mentira.
Ese hecho no fue otra cosa que la gota que vino a colmar el vaso, pero la anulación judicial de esa gota (no moral) no hace desaparecer lo que llenaba el vaso. Y la moción de censura le sobrevino por todo el vaso completo, no por una sola gota de ese vaso. Además, se intenta formar una imagen falsa de que solo se puede hacer una moción de censura si existe delito avalado por fallo judicial. Y eso no es verdad. En democracia se puede forzar un cese por mil razones, aunque no constituyan delito: mala gestión, prepotencia, incapacidad, nepotismo, malas prácticas, dedismo, absolutismo, mala práxis, o incluso mala educación… Basta que la mayoría del Pleno Municipal así lo considere y decida plantearla. Lo otro es querer hacer pasar por auténtico lo que es un vulgar embuste. Y pasarse, de paso, las mayorías y principios democráticos por debajo de los lereles, también…
Y ese es el intento que, desde ámbitos regionales, se ha montado como burda estrategia, con el fin de recuperar un feudo que le costó muchísimo ganar, que no recuperar, como maliciosamente dicen algunos por ahí, ojito... Incluso en el operativo están utilizando los medios de comunicación en nómina para dar la noticia sesgada y consultar en la calle en base a una pregunta previamente dirigida desde su enfoque. Hasta la fecha, ignoro el resultado. Pero todo va en la dirección de ese conato por invalidar un acto total y absolutamente legal y democrático. Si no prospera, como premio de consolación se pide una petición oficial de perdón. Algo muy tramposo por cierto, pues pedirlo es reconocer que se ha faltado, cuando sus faltas – suss reiteradas faltas – fue lo que motivó la moción de censura. No se puede, ni se debe, pedir perdón a quién, precisamente, debe de solicitar tal perdón.
Naturalmente, eso solo puede obedecer a un par de razones: o porque se quiere reconquistar lo perdido aún a costa de dudosos medios éticos, o porque los del gobierno de arriba participan de los mismos principios y valores absolutistas de los que ese municipio se quiso librar con su gobierno de abajo… O ambas cosas… O qué se yo, Pocoyo…