¡ MENUDA HISTORIA..!

La Iglesia (Católica) alemana está tensando la cuerda con el Vaticano (Roma), en cuestiones importantes y decisivas que el inmovilismo papista, o mejor dicho, de la curia acomodada y privilegiada, y trufada de riqueza y poder, no está dispuesta a consentir de ningún modo. Y mucho menos, aperturas de esos calibres, que amenazan con abrir los ojos y las mentes a los fieles… Ni por allá pasó. Pero la Conferencia Episcopal Alemana, a años luz de las demás conferencias episcopales europeas (la nuestra, incluso orbita aún en la galaxia tridentina), está decidida a plantar cara, no importe lo que hagan las otras…

            Ya lo hizo en su momento de la historia Martín Lutero, asqueado de la licenciosa vida de los papas y cardenales, y de un clero volcado en la corrupción, y todos amparados tras despóticos dogmas inventados. Ahora son otras razones de fe, aunque aún coleen en la actualidad algunas de las lacras más inconfesables de entonces… La apertura con que hoy la Iglesia alemana desafía al Vaticano es sobre conceptos como el celibato en el sacerdocio, la ordenación de las mujeres, la homosexualidad dentro y fuera del clero, incluso el eje de la propia Eucaristía lo tienen en revisión… Y advierten a la Santa Sede que, lo entiendan o no lo entiendan, los obispos alemanes debatirán sobre tales temas en el seno de su congregación…

            El follón, pues, está servido. La noticia, aparecida y hecha pública, hace un tiempo fuera de España, hace muy poco dentro (EP-17/09) y silenciada en lo posible por nuestra iglesia interna – sabido es la neocensura que ejerce la institución, y que aún logra establecer, a través del Concordato – está removiendo la atención de mucha gente, y desviando, claro, la de otra del interior de ella. Al menos de las personas no catequizadas por el aparato eclesial, pero que, aún creyentes, ejercen de librepensadores dentro de un cierto cristianismo cada vez menos católico, afortunadamente.

            Y puede que, precisamente, ahí mismo resida la cuestión. En que en Alemania, donde en su población islámica se está dando un proceso aperturista y desfanatizador sin precedentes (consulten artículo anterior en este mismo medio), los católicos están quedándose más fundamentalizados que los propios y denostados islámicos. Es posible que todo se deba a un salto cultural y educacional de la propia sociedad (a eso se le llama Evolución). No lo sé, pero la historia lo contará algún día.

            Francisco – o sus mentores, ya me entienden – han declarado “compartir la preocupación sobre el futuro de la Iglesia Alemana” y lo han calificado como “erosión en la fé”. Terrible constatación, porque cualquier alguien es muy libre de preguntar: ¿en qué fé..?, ¿en la que ustedes dictan que es y cómo debe ser?.. Y más adelante se les cae una afirmación que lleva la falsedad en sí misma: “…la Iglesia Universal vive en las Iglesias particulares igual que al contrario, y si se encuentran separados se debilitan, se marchitan, se mueren”…

            Amenaza superflua, amigos míos. Me permito recordarles que el propio cristianismo fue una escisión del judaísmo, porque lo superó. Luego, después, ya se sabe, a pesar de los que quieren ignorarlo, vino San Pablo, Nicea, Constantino… el catolicismo suplantó al (en vez de escindirse del) cristianismo… Pero eso, claro, es otra historia, como dijo Willy Wilder en una de sus películas…

            Aquí bien pudiera pasar lo mismo. Y es que, en definitiva, la Historia suele escribir su propia historia…

Publicado por MIGUEL GALINDO SANCHEZ en 23:33

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