NINGUNEO DE TEBEO

Vinieron los Reyes de España, don Felipe y doña Letizia, con zeta, ojo, a darse un baño de multitud caravaqueña en nuestra región murciana, por la cosa del Jubileo y eso… que Monarquía e Iglesia van muy unidas por la gracia de Dios, como ustedes ya conocen. Y, aunque fuese una visita rápida, ya saben, bajada del helicóptero, paseo, visita crucífera con genuflexión real in situ, paseo, pose con niño y fotos, y subida al helicóptero de nuevo y vuelta a casa… aquí tan solo se enteró la 7 y nuestros propios medios de comunicación. A nivel nacional no se dio por enterado ni el tito Tato. Por muy de turismo religioso que vistamos la mona.

            Eso es lo que pesa Murcia en el concierto nacional. Aunque el gobierno del Estado y de aqueste roal sean huevos de la misma gaviota. Los nidos son distintos. Otra cosa es lo que presume el menestral de aquí cuando se le deja ser digno de besar los cordones de los zapatos del puesto que tengo allí, que parece que van de íntimos en cuadrilla, miren ustedes… Imagínense que el viajecico, por mucho a salto de mata que fuera, hubiera sido a Santiago, a mal comparar. Los medios y cadenas nacionales y los telediarios se hubieran extendido y explayado todos hasta para cantar y contar la complicidad de los monarcas para con la mamá del crío dado a besar, lo simpáticos, y guapos, y corrientes que son, muá, muá…

            Pero han venido aquí, a Murcia, a pesar de que ya no somos matareyes, sino más bien todo lo contrario, besaculos. Y han venido por imperativo clerical y catolicual, se diga lo que se diga. Y, aún y así, este camino de huertanas indulgencias aún y apenas es caminico. Y todavía no es negocio del tó, ni es ná, aunque tó se andará, como camino que es, y los panes y los peces multiplicarán y el comercio florecerá. Y todo el que espera recogerá, que para eso se ha montado el tinglado, negocio de Iglesia y Estado, bacalado…

            Sin embargo, la enseñanza que esto nos deja, un ejemplo más entre muchos para quién esté libre de verlo, es el poco peso específico, ya no sé si económico, pero sí que social y político, que tiene esta región en el conjunto de regiones, salvo, claro, las noticias negativas que en esas sí, en esas sí que compartimos ránking con lo más granado del cortejo pellejo… Ni contigo ni sin ti – gobierno central – tienen mis males remedio, que cantaba la canción del desconsuelo.

            ¿De quién la culpa?.. ¿Nuestra?.. ¿de Madrid?.. ¿del desprecio ajeno?.. ¿de no saber hacerse valer?.. ¿de los murcianos, o de todos los demás?.. Mi opinión personal es que la responsabilidad de ser o no ser tenido en cuenta es siempre de uno, nunca de los otros. Que si no contamos es porque no valemos, o no sabemos de cuentas, o no creemos en nosotros mismos. Que si los demás creen que no servimos, es porque nosotros creemos que no servimos, o no servimos para darnos cuenta de ello… no sé si me explico, gayo Kiriko…

            Y vuelvo a lo que desde hace tiempo vengo repitiendo. Que si tenemos partidos disciplentes como los que tenemos (usted me manda, amo…) a lo mejor es que nos hace falta uno impertinente. Ya me entienden. Y si no lo tenemos, habrá que montarlo. Y si ya lo tenemos, habrá que votarlo. Pero está claro que en algo fallamos, y lo del caminico que lleva a Belén y no llega, no es por culpa de los Reyes, que ni son magos, ni son más que unos mandaos… Ellos solo hacen su papel en el reparto. Asumen su guión… Asumamos nosotros el nuestro, y hagamos nuestro papel.