NOSOTROS MISMOS Y MISMAS
- Por miguel-galindo
- El 31/12/2020
Según datos de nuestra Consejería de Sanidad, 75.000 murcianos han sufrido el Coronavirus en esta región. Vale. Pues entonces es el 5% de la población. Si la inmunidad de rebaño se estima en el 70%, aún nos queda mucho camino por andar y muchas olas que navegar, a pesar de una vacunación que va a trasegar un camino igual de lento. Lo malo son los muertos que dejamos por el camino, y las secuelas añadidas, y los colapsos periódicos en nuestros sistemas hospitalarios, donde a un cardiópata le toca la revisión justo cuando le da el infarto, y si no le da es que aún puede esperar…
Pero eso tampoco parece afectar mucho al personal… no al sanitario, que a éste sí, si no al general me refiero… Miren, lo estoy viendo sin moverme de mi propio pueblo. Muchos bares, como es natural y legítimo, abren sus ventanas en época de cierre, o sacan una mesa al portal, y sirven sus cafés, sus desayunos o tapas de llevar, o aquello que pueda servir, y la gente va, lo retira y se retira, se sienta en cualquier banco o soportal o escalinata más a mano, y se lo toma en buena armonía consigo mismo o en compañía, así que… Me entero por los medios que se están estudiando de nuevo los confinamientos perimetrales de aquellos pueblos que, en 1ª instancia, pueden abrir sus bares, porque se producen fuertes desplazamientos de las zonas vecinas solo para tomárselas allí…
Está muy claro que los españoles consideramos la barrabar como un artículo de primerísima necesidad. Y, en el fondo, estamos muy dispuestos a jugarnos nuestra salud y la de los nuestros por la misa diaria en el bar, y que no son ellos, los bares-iglesias (pues parroquianos de ellos somos) si no nosotros, los que transgredimos, a propósito y muy a gusto, las más elementales normas preventivas contra el contagio… Pues nada. Aunque se haya demostrado una bajada del 30% de media cuando cierran tales establecimientos, y puesto que ellos y nosotros, su clientela-parroquia, hemos hecho un frente común opositor, rindámonos a la evidencia de que no se puede, y dejemos que extendamos el contagio sin cortapisa alguna. Que nos permitan suicidarnos a gusto, ¿acaso no han aprobado la eutanasia?. Total, pá cuatro días cochinos que vamos a vivir… y algunos, dos ná más…
Tan solo es cuestión de aguantar un añico más así, y los que caigan, caigan pues… Nuestro muy ilustre presidente, Pedro Sánchez, afirma que, en seis meses, media España estará vacunada, así que solo se trata de esperar a que pase el tren y ponerse en fila. Nuestro jefe, naturalmente, no cuenta los imponderables (que no duden los habrá, ya en el primer día hemos tenido el primer retraso)) solo cuenta la afirmación demagógica que nos tranquilice, para que no demos mucho el coñazo.
Y todo se andará, no lo duden. Si no para estas pascuas, para las próximas. Nada más queda por saber un par de cosujas: cuánto tiempo va a ser efectiva la vacuna, y si se va a obligar a los panolis que no quieran, o no, pues de su solidaridad depende la inmunidad (del rebañado rebaño, claro). Porque esa es otra, los negacionistas, los interesados políticos, y los gilipollas que somos legión, están/estamos dispuestos a dar la batalla y poner las cosas aún más difíciles de lo que ya están. Y, según las estimaciones previas, hay como un 40% o así de la población que dice que nonis…
Miren ustedes, señores de los gobiernos y de las taifas, todos y todas, les voy a dar un consejo y sin pedirles mordida alguna: solo tienen dos opciones: o libremente, o por obligación, ¿no es así?.. pues bien, que sea por libre opción… Eso sí, los lugares de vacunación pública y control oficial que sea en los bares… Ya estudiaremos la fórmula, pero hay varias. Libertad para el que no quiera vacunarse, pero, dado que esos mismos bares son un riesgo, manga ancha para todo el que se haya vacunado y exigencia de pasaporte para el que no. Tal y como vamos a poner a caldo a Gibraltar si se tornan tontichulos. El que quiera seguir practicandor su fé en el bar, que se vacune, y el que no quiera vacunarse, que apostate… ¿No se han vendido ya en esta región tests sanitarios en una ferretería?.. Pues entonces…
No sé si fue Séneca quien dijo que las debilidades de unos son la fuerza de otros. Pues bien, si sacrificamos nuestra salud por un café desenmascarillado, bien podemos sacrificar nuestra idiotez por lo mismo. La vacunación bien vale una misa, como la valió París en su día…
MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php https://miguel2448.wixsite.com/escriburgo