PRÓXIMAMENTE...

            Antes de que el verano empezase, yo no me podía imaginar los roles con que la triderecha una, grande y libre (PP, Ciudadanos y Vox) iban a relegar en sus portavozas parlamentarias femeninas de las dos principales formaciones políticas, pero empezaron el curso político desatadas del todo. Mientras Casado y Ribera lo inauguraron con un perfil bajo y casi discreto (en lo que cabe en ellos), Álvarez de Toledo e Inés Arrimadas – arrímate Inés del alma mía – han asumido el papel de leonas de las cortes, dentro del hemiciclo. Son fieras parlamentarias. Yo no sé si la estrategia de ambos partidos hermanos es mostrarse feministas, o todo lo contrario, mostrar cómo son del natural las mujeres, así como advirtiendo un “guardadse de ellas, ahí tenéis el furor desatado de Me Too”, mientras les hacen guiños a los voceros de Vox.

            No lo sé, pero ahí andan ambas dos, asumiendo encantadas el papel de mascahuesos asignado. De momento, al menos, claro. Otra cosa de lo que me enteré en este verano es de la existencia de la listeriosis. Una jodida enfermedad que anida en la carne mechada y que puede jorobar bien jorobada a la gente que en este país aún se puede permitir comer carne, y encima mechada. Se debe a la bacteria Listeria, que encima tiene nombre de personaje de programa infantil de los setenta, pero de la que hay que guardarse muy bien guardado… pues tan dañina es ella en sí misma como los políticos que gestionaron esta crisis sanitaria. Casi peor los segundos que la primera, con toda seguridad, pues primó la peor inseguridad.

            Fíjense que el Consejero de Sanidad de Andalucía, no solo se permitió el lujo de acusar a la oposición de falso alarmismo (torpe acusación, porque era más que eso) sino que encima presumió de su propia – y lamentable – actuación. Una actuación tan deplorable que causó varias muertes, abortos y gran número de hospitalizaciones. Y que estuvo a punto de convertir a la Listeria en pura histeria…

            Yo no sé si su conciencia le soplará algo, o es que será sorda, o la tendrá enmudecida, pero eso no debería haber pasado. Para ser el primer gobierno autonómico andaluz de derechas de la democracia no ha dado una a derechas. Se ha lucido. Pero es que Ciudadanos y PP han respaldado esa gestión con la misma energía y desvergüenza con que respaldaron la de Díaz Ayuso en la de Madrid facilitando cargos públicos en plan nepotismo ilustrado, como al que fue director del tristemente famoso Madrid-Arena… Patético. Esta es la “Regeneración” con que Ciudadanos nos engañó en la anterior campaña. A ver con qué nos engaña en ésta…

            Y si este es el comienzo del presente curso parlamentario con elecciones a la vista, con un gobierno en de/funciones y una izquierda sola, desamparada y dividida, que no quiere caer en el mismo brasero que ha caído la derecha, mal otoño nos viene, coño… Esto es como una película de terror de serie B, que empieza con un virus de casquería mutante, una especie de Alien listérico, que mata inocentes mientras desova en las mentes de políticos corrompidos, indecentes y monolíticos, que son sus nidos naturales. Esta es la primera de la serie, y será presentada, seguramente, con sus secuelas pertinentes, en el Festival de Sitges… Como en los cines antiguos: Próximamente en esta Sala.

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