TRILEROS

 

TRILEROS

Lo he escrito en varias ocasiones, y, al final, tengo el dudoso mérito de que Bruselas me dé la razón, como a tantos que lo vienen repitiendo antes y después que yo. La CEE considera que los Presupuestos Generales del Estado presentados por España para el 2.016 no cumplen el compromiso de déficit adquirido por este gobierno. Y no es que haya presentado unas cuentas que así lo reconozcan, no, es que ha presentado unos números trampeados, unas cuentas públicas electoralistas, falseadas y manipuladas. Y no cuelan.

En mi artículo de prensa “Aviso a los Jubilados” ya advertí sobre las partidas con las que estaba trampeando el gobierno del PP… Aquí me invento unos ingresos fiscales que ni de coña se van a producir, allí disminuyo unos gastos que ni yo mismo me creo, y voy cuadrando la engañifa hasta que se produzca el socavón, que taparé echando mano a la caja de las pensiones e iré cuadrando la diferencia con los Presupuestos del año próximo, haciendo crecer de nuevo la ilusión de los ingresos por fiscalidad, y damos otra vuelta a la rueda, que mientras rula, no chamba…

Pero son unos chapuceros, y en Europa se han dado cuenta. Y no tragan. Aunque el guindador Guindos se empeñe en proclamar lo contrario y en decir que es que los de Bruselas no saben de números. A lo mejor – o a lo peor – lo que no saben es de cuentos, pero sí de cuentas, y el señor Guindos se cree que es que se han caído de su apellido. Lo que en realidad  pasa es que Rajoy no ha calculado bien los tiempos y se le ha quedado el culo al aire.

Porque su estrategia era tan burda como sencilla: yo preparo unos presupuestos tramposos, y sin tomarme el trabajo siquiera de disimular trolas como trolebuses para el 2016… como la administración de la CEE es lenta y parsimoniosa, su juicio saldrá después de las generales, que, por otra parte, intuyo que voy a perder la mangonería absoluta. Así que a ver si la mierda y los problemas económicos le explotan en la cara al nuevo gobierno, al que nosotros, ya desde la barrera, podremos echar la culpa de todo, a la vez que proclamamos al respetable (que aparte de respetable es gilipollas), “ya os lo advertimos, éstos nos arruínan…”

…Sí, lo sé, esto es maquiavélico, y es cierto. Sin embargo, yo no creo que éstos hayan leído a Maquiavelo. Ni a Maquiavelo ni a nadie. Éstos no leen, solo hay que ver lo que están haciendo con la cultura, despojándola de todo fundamento como tal… Lo que pasa, es que son de natural espesos, y la espesura suele ser caldo gordo y propicio para estas formas de actuar, para esta manera de apañar las cosas. Patada al balón hacia adelante, y el que venga detrás que arree… O que arreen los burros de los administrados, “que p´a eso están”…

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / www.escriburgo.com