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El científico Pérez Ruzafa lo dijo no hace mucho muy clarito en nuestra inefable siete. Lo inexplicable es que no actuase la tijera invisible, por lo que alguien pagará el despiste:

"Al Mar Menor le esperan meses muy malos, por el aporte de nitratos a través de un acuífero excesivamente cargado"... Un acuífero que esta administración prohibió descargar (cerrando los pozos de sequía) con multas, castigos y demonización a los agricultores que los tenían abiertos...

¿Cómo se puede llegar a esto?.. ¿manifiesta incompetencia?. Añada usted lo que piense al respecto, pero estos son los políticos que nos hemos dado para que nos gobiernen. De absoluta vergüenza...

                Me achacan que estoy escribiendo demasiado, y siendo igualmente demasiado crítico con mi pueblo… que si el comercio, que si la decadencia (claramente observable) que si esto, o que si lo otro. Puede ser. Puede que se me eche en cara por sentirse responsables de la posible solución. O puede que no. Pero no puedo dejar de observar y pensar… y escuchar. Los medios de comunicación, las tendencias, tus propios conciudadanos… No solo es lo que se ve día a día, en las calles, claramente, sino también los parámetros que nos sobrevienen y la parálisis que nos sobrevuela… Y perdónenme que insita.

            Hay una tendencia – aún no acusada, pero sí preocupante – de familias que están poniendo sus casas a la venta, a la baja, de forma y manera sistemática, para largarse de aquí. Bastantes, y va a más. “Antes de que no saque por mi casa ni pá pipas”, suelen decir. Y el comentario unánime de familias que fijaron aquí su residencia hace 30, 40, o 50 años, es que no les gusta nada en lo que se está convirtiendo el pueblo. Que esto ya no es el lugar que eligieron para establecerse. Me duele como al que más, pero tampoco quiero engañarme a mí mismo. No estoy ciego, ni sordo. Ni quiero estarlo tampoco…

            Y me doy cuenta de los informes, serios y fiables, que anuncian que, en tres o cuatro décadas, el 70% de la población volverá a vivir en ciudades. Y me pregunto las causas, los motivos, el por qué… Y veo que los dos polos de desarrollo a los que, aquí al menos, nos hemos aferrado como únicos (craso error) están en las últimas. La agricultura, por la escasez de agua, por la crisis en los mercados, porque se acaban las ayudas exteriores de la UE, por el secuestro de sus cadenas de distribución, por el sambenito contaminante, o por tantas otras cosas… Y el turismo, por la simple deriva del cambio climático y por nuestra decidida aportación al desastre de nuestro entorno, y por la ruina de nuestro única cosa que vender: el Mar Menor… Y no creo que nadie pueda decir que me estoy inventando todas estas cosas…

            Y entonces, pues sí, claro, pienso también en la actual España vacía de la que se está hablando tanto, en esos pueblos turolenses, y de cada vez más lugares, que se nos muestran ya más muertos que vivos… “Aquí, hace diez años, aún había seis bares, diecisiete comercios, un par de industrias, tres entidades bancarias y dos escuelas”, le oigo decir al alcalde de uno de ellos en un telediario. “Ahora solo quedan un bar… lo demás ya no existe”, se lamenta. Y dice el precio de una de las muchas casas vacías, “por cuatro mil euros puede comprarse una vivienda aquí”. Y aún prosigue, “… y me pregunto de quién es la culpa”…

            Y sumo uno y uno y, naturalmente, me siguen dando dos… No falla. Como no falla lo que este pueblo en el que vivo, y otros como él, van a llegar a ser, si sigue esta misma cuesta abajo en que se ha instalado hace algunos años acá. Y me pregunto, como ese alcalde, de quién, o de quiénes, puede ser la culpa… Y me respondo a mí mismo que de todos. De los ciudadanos que desertamos de nuestros comercios, de comercios que desertan de sus oportunidades, de propietarios que desertan de sus realidades, de políticos que desertan de sus responsabilidades…

            …Y quizá sea en estos últimos donde residan ya las últimas posibilidades de frenar esta tendencia, de estabilizar esta gradual degradación que se ve y se palpa en las calles, y de echar todos los restos, todos, en un único objetivo: invertir el proceso. Yo no digo que sea fácil, lo que digo es que más tarde ya será imposible. Y lo que también digo es que sus ayuntamientos se crucen de brazos viéndolas pasar en un “mantente mientras cobro… mis aún buenos impuestos municipales”, es de una temeridad casi que irresponsable. De momento los Ibis son desproporcionados a su realidad actual y ajenos al empobrecimiento gradual de sus municipios.

            …Y si hay que cambiar el modelo, pues se cambia. Pero cualquier cosa antes que terminar en un pueblo muerto y vacío de otra España vacía, que parece comenzar a cernerse por estos lares. Ya la gente lo palpa, y se larga de aquí. Yo lo palpo, y lo largo aquí. Es distinto, pero es por lo mismo.

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 13 Marzo: …PUES HABLEMOS DE SEXO

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A Borrell le cayeron las del pulpo por decir una verdad incuestionable a los verdes. Les preguntaba (con respecto al cambio climático) si conocían el costo social y en pobreza cerrar minas y fábricas dejando a miles de familias en la calle, y si no sería mejor hacerlo gradual y empezar por educar a esos cientos demiles de familias para unos nuevos hábitos de consumo y ocio...

Un pensamiento muy razonable y prudente. Pero los pacíficos verdes quieren linchalo. Es mejor el verdismo subvencionado, el negocio verde, la conciencia normalizada, que la puñetera realidad.

Lo cierto es que la conciencia ha de ir antes que los hechos. Si es al revés, no sirve de nada.. Ahora vienen y me crucifican a mí por decirlo.

He oído en un informativo de la televisión una noticia que me permito trasladarles y comentarles (pero tienen que perdonarme el que no me haya andado listo para “quedarme” con la fuente del informe). Es de esos casos que, cuando lo que se dice capta tu interés, ya han informado del origen, y no lo vuelven a repetir. Deberían darlo con la secuencia al revés, pero en fin… Hay otras cosas que las repiten hasta la náusea, y éstas sin embargo tienes que cazarlas al vuelo, como las moscas, porque no te enteras.

            Pero a lo que íbamos: El tal informe dice que en el año 2.050, el 70% de la población vivirá en ciudades… Y esto, no me digan que no, da qué pensar. En la Edad Media hubo un repliegue de lo rural al burgo por una razón: la seguridad, el sentirse protegido tras unas murallas, y se sacrificó un medio natural y salutífero por el hacinamiento y las enfermedades. Vale. Después, en la era moderna, en la época del maquinismo, fue el trabajo y la necesidad de labrarse un estatus lo que hacía vaciarse los pueblos y llenar las ciudades. De acuerdo.

            Sin embargo, dentro de dos o tres décadas, por qué?.. ¿Cuál será el motivo?. Estamos en el inicio de un proceso en que empiezan a darse movimientos de querer repoblar los pueblos que fueron abandonados en su día. De una “España vacía” – así se hace llamar el fenómeno – y que comienza a reivindicarse y a denunciar los motivos de las fugas… y, sin embargo, se nos anuncia otra vez el movimiento contrario, que el personal tenderá a largarse otra vez al amogollonamiento de las ciudades. El informe no explica la causa, los motivos que habrá, y si lo comunican, los medios de comunicación no lo comunican. Se ve que esto interesa bien poco al ciudadanaje, y entonces van y lo omiten, claro… Pero a mí, aunque ya esté criando malvas, sí que me pica la curiosidad del por qué amontonarse de nuevo en los burgos.

            Quizá sea cuando el cambio climático en ciernes se vuelva adverso, que nos acojone aún más y entonces volvamos a buscar la seguridad en juntarnos, y así combatir el miedo a una naturaleza cabreada. Puede ser eso, una respuesta geneticopsicológica… De hecho, leo en la prensa actual que el Mar Menor pierde cada años un par de centímetros de profundad por la sedimentación de los arrastres... Según eso, acabaría por vaciarse en el Mediterráneo. Por otro lado, la subida del nivel del mar que ya se está produciendo, también se suma a esto como un añadido más al mismo resultado, o sea, que empuja al Mediterráneo a invadir el Mar Menor. Total…

            Sea como fuere, ambas tendencias se unen para la desaparición de aquello que, ahora, a la vejez viruelas, nos obstinamos en proteger y salvar… Y así en todo lugar y naturaleza. El entorno se nos torna jodido y puñetero, así que se prevé la huida de nuevo. Quizá sea eso…

            Así que los vendedores de lo verde ya anuncian sus negocios a tal efecto: que si menos tráfico contaminante y más traslación con nuevos inventos de hábitos urbanos. Que si sistemas de captación de energía solar comunitarios no contaminantes. Que si cambios verdícolas en construcciones verdes de hábitats verdes para el personal verde. Que si otros transportes públicos, ecológicos que te cagas… Se trata de hacer caja con el nuevo panorama que se presenta, donde las etiquetas verde, bio, reciclaje y compañía será lo que se venda y se compre en un nuevo mercado centrado (y hacinado) en las urbes. Ya se están preparando – esto sí que lo adelanta el informe – las tendencias y negocios. Las ubres de las urbes.

            Pero yo sigo dudando, recelando y pensando por lo derecho… ¿Acaso vivir, expeler y respirar, y otras cosas más, miles de humanos en dos palmos de terreno es sano y natural?.. ¿Es que la atmósfera del campo quedará contaminada y la de las ciudades purificadas?.. ¿o es que pondrán burbujas protectoras eco-bio-respirables para sus burguesados?.. No, que yo sepa, más bien al contrario… ¿Entonces?.. Yo opino que cuántos más apretados en la ciudad, más anchos y holgados fuera, y eso no puede ser malo para la salud, más bien al contrario. Otra cosa de la salud es la comodidad, naturalmente… Y si la catástrofe es generalizada, cuanto más espacio tengamos, digo yo que mejor… ¿O acaso no?..

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 13 Marzo: …PUES HABLEMOS DE SEXO

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Los murcianos somos campeones del mundo en algo: en litigar. Murcia tiene la tasa más alta de litigios del mundo entero y verdadero. Somos la repera. El CES lo relaciona con el paro y con el empobrecimiento, pero yo no lo creo. A mí me parece que es cosa de nuestra cultura... o de nuestra incultura.

Aquí, los juzgados andan colapsados, y el presidente del TSJ pide a gritos más jueces y más mediadores. Si hubiera más de los segundos no se necesitarían de los primeros, pues la Mediación evita los juicios...

Dicen que el refrán de "más vale un mal arreglo que un buen juicio" es un dicho muy inteligente... Pero, claro, solo para inteligentes, añado yo...

Me dicen por la calle que es raro, muy raro, que no escriba sobre el coronavirus, o dicho en científico, la Covid-19, que es como han bautizado a la jodida y jodedora bacteria ésta… Bueno, es que estaba esperando un poco más, a que se aclarase esto, o bien eclosionando en un castillo de fuegos artificiales, o bien haciendo crisis, mustiándose, como una maceta expuesta al solanero. Porque, en definitiva, es lo que creo yo que va a pasar. Que las autoridades sanitarias están dando largas y carrete, a ver si entretanto se mete la primavera y el verano y se achicharra el virus por lo natural, pues parece que el bicho no aguanta por encima de los 30º.

            Es que, miren ustedes, lo que a mí me parece que es, ni más ni menos, que una gripe más de las muchas que hay, de tipo A, que son jodidillas, pero otra más, lo que pasa es que para esta aún no se tiene la vacuna. Y dejémonos de cuentos. Cuando se descubra la nueva cepa, se incluirá en las vacunas subsiguientes, y listo. A esperar que mute alguna de las de la colección que tenemos en el álbum, o que salga otra nueva y nos meta otra vez los cerotes en el cuerpo… si la cosa así viene y conviene.

            Pero la incidencia, óigan, es la misma. Se propaga tal que una gripe, que es lo que es. Se casca en función de la edad, complicaciones y riesgo de quien la pilla. Se contagia del mismo modo y manera, tiene el mismo ciclo de incubación y evolución, y el mismo de resolución, y se parece tanto como una gripe a otra gripe… Ya digo, la única novedad con respecto a su parentela es que es un patógeno que, aunque se comporte igual que sus primos, es joven, nuevo, y no catalogado en sanidad. En cuanto ambos sean presentados y el primero fichado, a otra cosa, mariposa… De ahí el follón (¿interesado?) con que se desvían los portavoces sanitarios, que por un lado quieren dar la sensación de que controlan la situación (impecables cuentas de ingresos, infectados, no infectados, fallecidos, altas, pruebas positivas y/o negativas…) y por otra, el aparente – y real – opuesto. Miren a nuestro portavoz de Sanidad, que parece más bien un elfo contable.Hace días llegaron aquí al lado cien chavales de viajes de estudios de la zona norte de Italia, y ni puñetero caso…

            Miren además: el primer muerto en este país, en Valencia, un octogenario fallecido por neumonía que, al hacerle la autopsia, se dan cuenta que tenía coronavirus… La siguiente, en Madrid, una anciana de 99 años con patología suficiente como para mudarse al ático ya de una vez por todas... Pero la confusión abonada en el personal de la calle hace que de los centros sanitarios desaparezcan miles de mascarillas tapamiedos que denota la irresponsabilidad manifiesta de los que las sustraen, que dejan a sus… ¿compañeros?.. desprotegidos en su diaria exposición pública, no ya a un coronavirus, si no hasta a una meningitis. Nuestros profesionales quedan inermes ante cualquier contagio por la ignorante, absurda e insolidaria respuesta histérica de la gente.

            …Cuando lo que hay es que educar al personal, formarlos e informarlos. Los pacientes deberíamos de estar familiarizados a que, al igual que el estetoscopio, la mascarilla cuelgue de toda bata blanca, sea en ambulatorio, clínica u hospital. Es lo de sentido común. Lo otro, lo de ahora, es una estupidez supina, fruto de un pánico irracional y provocado. Ellos deben estar protegidos de nosotros, no al contrario. Si nosotros queremos protegernos de nosotros mismos, hay cien maneras mejor y más efectivas de hacerlo que colocándose la mascarilla…

            Piensen en una sola cosa: supongan que no exista la prensa, el telediario y el machaque diario al que estamos sometidos… ¿habríamos captado que existe una pandemia?. No. Es un resultado a sumar a la de las gripes de todos los años, y ni nos habríamos dado cuenta. El pasado año, sin coronavirus de comecocos, la gripe común se cobró cerca de 6.000 muertes en España, en pacientes de riesgo, claro. Haga una simple comparación de resultados y de comportamientos…

            Hay algo que no puedo evitar pensar, y me permito compartirlo con ustedes que me leen: antes del coronavirus ya se sabía que este año nos venía una recesión económica como réplica de la última (esto es como los terremotos). La anterior fue provocada por unos culpables concretos convictos y confesos. Vale. De momento, a ésta se le ha buscado uno al que no podemos llamar hijoputa: el coronavirus… ¿a quiénes pedir responsabilidades?..

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 13 Marzo: …PUES HABLEMOS DE SEXO

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El gobierno ultraderechista polaco quiere tramitar una ley que prohiba la formación sexual en las escuelas. Curiosamiente, es idéntica a la que impuso el régimen comunista que dominó ese mismo país en su tiempo, e igual a lo que Vox quiere...

No me digan ustedes que los extremos no se tocan... Se tocan, se abrazan y se acarician, y se mimetizan como buenos hermanos gemelos que en realidad son...

La izquierda y la derecha, cuando se hacen ultras, se convierten en la misma dictadura, aunque los símbolos sean distintos. No existen más diferencias que los signos, pero ambas privan de libertad y derechos a las personas.

https://youtu.be/LynXoVS7RwA 

“Dios hizo el mundo” reza en el catecismo, proclaman los catequistas y repiten los catecúmenos. Dios  creó al hombre, y los hombres inventaron a Dios, aventuran los filósofos. Dios no se creó A sí mismo, pero quizá se creó EN sí mismo, avanza la ciencia con prudencia. Pero nadie sabe aún qué es Dios, y muchísimo menos, quién es Dios… Pero, sin embargo, todos tenemos un “Dios mío” dispuesto, propio y personal, de uso doméstico y cotidiano, formal y familiar, para los casos de apuro y en todos los asuntos de nuestra vida. Algo a lo Que acudir y de lo Quien servirse en caso de necesidad. Algunos tenemos hasta dos dioses: ese, el tribal y de la sangre, el totémico, el lar de los romanos, y el otro añadido, el intelectual, el elaborado por el/los, conocimientos… El mío mental, por ejemplo, es tan elaborado como simple. ¿No se dice que Dios es eterno?.. pues entonces, es el señor del tiempo, y por lo tanto, Dios es tiempo, lo que pasa es que nos dejó que nosotros manejásemos las horas…

                Por supuesto, ahora viene la física y la relatividad y le echa un jarro de agua fría a mi idea mental, diciéndome: “pero atontao, si el tiempo no existe, es solo una percepción, si ya Einstein lo demostró, ¿ánde vas tu ahora con eso?.. Lógicamente, si el tiempo no existe, y Dios es el tiempo, Dios tampoco existe… Así que entonces, voy y me reformulo la fórmula (válgame el cielo y la redundancia), y me digo a mí mismo: Bueno, pues si Dios no es el tiempo, a pesar de su eternidad y de disponer de todo el tiempo del mundo, entonces sí que creó la ilusión del tiempo, y para no perder la imagen con que terminé mi párrafo anterior, a nosotros nos arrendó las horas, para que jugásemos con su magia y aprendiéramos con ellas y de ellas…

                Porque, en definitiva, de eso se trata, de jugar y aprender en infinitas partidas que, en realidad, son y pertenecen a una única y sola partida. Si estudian un poco la Historia de la Humanidad, verán que hemos fundado infinidad de civilizaciones que, indefectiblemente, todas han terminado en decadencia y muerte. Todas han desaparecido destruyéndose a sí mismas, empezando otra de las cenizas de la anterior. Pero, sin embargo, cada una de ellas ha ido llegando un poco más lejos que la otra en todos sus parámetros de desarrollo humano… aunque, al final nos alcance la misma incapacidad de superarnos, y decaigamos hasta nuestra propia destrucción… y tengamos, otra vez, que empezar de nuevo. Es como si fracasásemos,  pero cada vez llegando algo más lejos… O como si, fracasando aprendiéramos a andar cada vez un tramo mayor de camino, por decirlo desde otra perspectiva de ese mismo camino… O sea, jugando y aprendiendo con esas (y en esas) migajas de horas que Dios nos presta de un tiempo que solo existe en nuestra imaginación pero del cual él posee el reloj…

                Todo indica que esta actual y última civilización, como las otras, está llegando a su final. Las señales de su decadencia son claras. Tanto en lo moral como en lo material (si bien lo uno es consecuencia de lo otro). Algún avisado me opondrá: Acho, tío, esto es causa de la propia evolución, por lo tanto, es normal…”, y así será, no lo niego. Pero para evolucionar está claro que hay que fracasar, y así aprender para reintentar. Y si en el fracaso arrastramos a y arrasamos con, nuestro propios valores y medios naturales, solo cabe volver a la línea de salida y empezar de nuevo, y quedará lo que dejemos y nos pueda servir para reiniciar algo mejor… Hemos tenido muchos Finales de los Tiempos desde que el mundo es mundo. Muchos finales de partidas…

                …Y ninguna ha sido la definitiva. En todas hemos llegado más lejos. Y, aunque siempre nos hemos dado jaque mate a nosotros mismos, también la siguiente nos ha sido dada con más escaques. El tablero cada vez parece ser más amplio y más grande… Sin embargo, ¿y las fichas?.. Porque, aunque Albert Einstein dijera en aquella famosa frase suya que “Dios no juega a los dados”, que bueno, que vale, que puede ser, pero con fichas sí que juega. Ya lo creo que juega…

                Tengo una nieta de apenas ocho años que me soltó, así, sin anestesia, ni epidural, ni nada: “…si yo no creo en Dios, abuelo, pero sí creo en el Karma”, sonriéndome como un ángel, y sin querer decirme, la puñetera, donde leches ha aprendido eso… Si yo me retraigo a mis ocho jodidos años, en este tiempo de Dios en el que nos movemos, e intento revivir lo que yo pensaba entonces al respecto, me bloqueo como un pedrusco de granito. La diferencia es tan brutal, tan inimaginable, tan sideral, que siento vértigo… Si una criatura hoy asume no creer en (el) dios que queremos enseñarle, pero sí entiende la arcaica doctrina que encierra una teoría de la evolución, parece un contrasentido, pero la verdad es que tiene mucho sentido. Para poder saberlo, tan solo hay que saber razonarlo.

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 13 Marzo: …PUES HABLEMOS DE SEXO

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El hipócrita rechina y crugir de dientes que se lió con el nombramiento de la fiscala generala, llegó a contaminar hasta a la ignorante calle. Vale. Pero eso ha sido siempre así, ¿no..?.

Todos los gobiernos de la democracia, Suárez, Felipe, Aznar, Zapatero, Rajoy... nombraron al Fiscal General del Estado. Mal, o bien, todos los  gobiernos lo ha hecho...

Me parece bien que se conviertan defensores de la independencia judicial, pero me parece mal su fariseísmo. Si tanto creen eso, ¿por qué no firman un acuerdo de partidos para dejar en manos de la propia judicatura tales nombramientos?.. Yo se lo digo: porque es todo falso, mentira... Y ellos, unos embusteros.

La derecha siempre se ha distinguido (me remito a la Historia, please) por ser la parte más reaccionaria de la política, entendiendo por reaccionario todo aquello que se opone a cualquier cambio y/o innovación, ya saben: a toda acción, una reacción en sentido contrario, si nos atenemos a la ley física, y el mote les cuadra al dedo, pues reaccionan a cualquier acción que implique movimiento, pero si la reacción es también un reactivo, entonces el significado es paradójico, pues esta gente es más pasiva que reactiva…

            Eso no quiere decir, naturalmente, que actúen como unos consumados hipócritas, llegado el caso. Por ejemplo, en su tiempo se opusieron a la Ley de Divorcio como condenados cruzados de una causa, para inmediatamente, una vez aprobada, divorciarse como el que más. Así que no se oponían realmente. Luego vino la Ley de Interrupción del Embarazo, y el ejército de los justos se movilizó de nuevo anunciando el apocalipsis moral, pero una vez aprobada, igualmente se apuntaron a practicarlo exactamente igual que los demás… Esto me recuerda cuando el tito Paco Franco, el bajopalio, cuando lo del aborto era un megasuperpecado de los gordos y delito incuestionable – asesinato, lo llamaban – pero ellos mandaban a sus hijas, esposas y amándibus a Londres para solucionar sus carnales deslices…

            Ahora tenemos lo de la Ley de la Eutanasia. La reacción reaccionaria en la Cámara de los Diputados fue bochornosa, pues parecían inquisidores de baja estofa, Torquemadas encendidos, y no se descarta que aún movilicen sus santas hordas, sí aún les quedan en la calle suficientes cerebros y cabezas rapadas, que creo que sí, que les quedan bastantes. Pero verán también como, una vez la Ley en marcha, no se cortan un pelo en usarla en todos los casos que les ataña, con toda fruición. Exactamente igual que se divorcian y abortan. Es de un fariseísmo muy práctico y cómodo: primero lo combato y luego lo utilizo. Me opongo aunque sé que voy a beneficiarme de ello. Es la doble moral aprendida de sus mentores y mientores de la sagrada congregación: primero se presignan y después pecan.

            Y es que de tal casta le viene al galgo. Es lo que la Católica ha hecho desde que existe. Se opone por principio a la ampliación de los derechos ciudadanos para luego beneficiarse de ellos y, de paso, ampliar los suyos. Es, ni más ni menos, que su filosofía del pecado: anatemizan cuanto pueden a fin de tener al creyentismo cogido por los confesionarios, pero ellos gozan a descosido de la lujuria, avaricia, poder, privilegios y riqueza… ponga en el platillo cualquier pecatus tuus.

            El mismo sistema, la misma escuela y la misma secuela. En el fondo, la derecha-derechísima no quiere que los ciudadanos compartan los derechos que ellos desean para sí solos… ¿Se acuerdan del falangista-franquista?.. Todo lo hacía por la Cruz y el sotanaje, pero practicaba los mismos abusos de los que acusaba al comunista desmedido. Las salvajadas bien pueden ser las mismas, más las justificadas por lo sagrado se bendicen.

            Lo que yo llamo los derechos de la derecha. O lo que es igual, a la derecha de cualquier derecho. O lo que es lo mismo, que no es igual para ti que para nos. Exageraciones y apocalipsis aparte, las libertades ciudadanas no obligan a ningún ciudadano a practicarlas si no quiere. Todo es según conciencia de cada cual, pero nadie, nadie, tiene derecho a ser la conciencia de nadie. Existe el respeto a elegir. Condénese o sálvese el que quiera, si quiere, pero que ninguno salve ni condene a otro… Cuando la ultra-derecha (que yo ya la confundo con la derecha, dado lo que hay) use esos mismos principios, empezarán a ser creíbles y dejarán de ser falsarios. Pero mientras se comporten así…

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 6 Marzo: EVOLUCIÓN Y DECADENCIA

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Los obispos han propuesto una especie de Máster Prematrimonial de dos años. Creo que sin meritoriaje y estoy seguro que sin prácticas. Otra cosa será el currículum dogmático y fedatario, claro, que no hay que descuidar el negocio de hoy...

In illo témpore, con un cura fuera de su tiempo, amigo y hermano, yo dí cursillos prematrimoniales: sociología, antropología, psicología, sexología, salud y parto, con médico, comadrona... e incluso se daba religión. Tres meses duraba aquello.

Así que, ahora bien podría montar yo una academia de cursos prematrimoniales, por lo Civil, naturalmente. Que lo que quiere la Iglesia es quitar méritos a los que se casan por el juzgado. Y eso tampoco es...

Lo dijo y declaró Imanol Arias, vox et pópuli, a quien quiera leerlo, verlo y admirarlo: “Hacemos éxitos como en EE.UU., pero cobramos como en Tailandia”… ¡ Pobrecico mío, que no tiene con qué empinar la olla…!. Se lamenta de lo mal pagado que está, pero dispone de recursos suficientes como para ser llamado al juzgado por el fisco. Tendría que, antes de abrir su picodoro, mirar cómo estamos la inmensísima mayoría de los que intentamos sobrevivir en este país, con el mayor índice de desigualdad de Europa. Él, al fin y al cabo, reside en el ático del cuento, cuéntame. Son de los que pillan jamón, no hueso.

            Pero el ínclito (actor que fuera de aquí no se le conoce) desea cobrar como en Norteamérica, pero con el nivel de vida de aquí. Naturalmente, no es tonto, no… Solo para que le estire el sueldo, a ver si puede llegar a fin de mes, tal que yo mismo. Él quiere ser (yo creo que ya lo es) como esos anglosajones que viven aquí tan ricamente con sus nóminas de allí. Pues él mismo tiene la solución en su propia y dolida declaración: Lo que tiene que hacer es irse a vivir a Tailandia. Y ya está…

            Pero si quiere seguir viviendo en esta santa tierra de un cuéntame eterno y sin ningún Trump que le pueda avergonzar – aquí tenemos nuestras propias vergüenzas -, es apañarse a lo nuestro, que ya lo conocemos y nos es familiar, y no tentar al diablo, que en otros sitios pagarán más, sí, pero no atan los perros con longaniza, y donde la longaniza es bastante más corta y cara que aquí… cuando hay longaniza, claro. Que aquí, buena o mala, para los de su clase siempre la hay. Que acá se vive en una fiesta contínua y constitucionalizada, donde la sociedad común formamos un Hola generalizado para los de su profesión, que le piden selfies  hasta en las Batuecas, y eso no se dá allí en su caso por mucho EE.UU. que sea…

            De hecho, escribo esto desde el mirador de mi Mirador, cuando todos los colegios del pueblo, todos, sin faltar uno solo, han sacado los críos a la calle… no sé si por imperativo legal, si por indicación municipal o si por “obligación” tradicional, todos disfrazaditos por uniformaditos, comparseando con sus educadores. Todo la mar de bonico y enternecedor. Un coche por detrás, otro por delante, con sus luces en tiovivo y un par de gigantescos bafles con un volumen estremecedor, y flanqueados en las aceras por una procesión de mamispapis, modelo “estaesminiña” y “estesminiño”, fotografirodando con rostro de éxtasis como acompañantes circunstanciales del evento, y los inevitables abuelos con cara de compromiso.

Y esto es lo que somos y así es como estamos. En el país de Alicia. Donde todo es jauja y fiesta. Donde y cuando me acabo de enterar que me bajan la pensión (me desquitan más de lo que me suben) pero donde todo el mundo aplaude feliz, contento y satisfecho… Hoy, Carnavales, mañana Fallas y Sanjosejadas, pasado Semanasantas, y usted mismo de celebrado pregonero si así la place apuntarse… ¿por qué y para qué quejarse?.. Usted, señor Arias, aquí vive en el mejor de sus mundos posibles, se le conoce y se le reconoce por lo que hace y por cómo lo hace – que aquí gusta mucho, créame – y se le respeta e idolatra por ello, y chupa del couché cuando le falta pá un capricho, así que, ¿qué más quiere?.. ¿cobrar encima como si fuese un Róbert de Niro?. Es que no lo es, y, además, tampoco es americano, ni se las ventila allí (ya le digo que le iría peor que aquí), que acá es una celebridad y allí una mediocridad. No tiente al diablo, amigo mío, que es quién carga sus armas .Y las carga con bala, que lo sepa...

Usted no se mueva de aquí, donde en familia se cotiza mejor. Y el revisteo se paga bien y se vende superior. España es de esos lugares donde se puede vivir espléndidamente vendiendo imagen, donde la popularidad cotiza en bolsa. No importa lo bueno o lo malo que sea un actor o una actriz, solo tiene que asomar el careto en una televisión y luego pasar por caja. Hay mil programas donde vender el tipo. Y a cobrar. E incluso a evadir lo cobrado.

Así que, ¿por qué dice esas tontás?.. Es como escupir a la mano que le paga, y solo muestra el lado egoísta, insolidario y poco amable que cada cual llevamos dentro. Y usted tiene buena prensa, no la estropee con estas gilipolleces. La cosa y el caso está en que las personas públicas que viven del público deberían respetar más a ese mismo público, ¿comprende lo que le digo?.. Posporesomesmo…           

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 6 Marzo: EVOLUCIÓN Y DECADENCIA

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Me contestaron a un anterior de éstos, ("Fariseos"), que en los países anglosajones, la figura de Fiscal General del Estado también la nombran sus gobiernos, y no pasa nada, que es perfectamente democrático y eso...

Naturalmente. Solo que allí los nombran, pero ya no los des-nombran, salvo por dimisión, enfermedad o muerte. Así se salvaguarda la independencia, ya que, no estando condicionado su puesto, puede obrar con mayor libertad de conciencia...

Es que no es lo mismo a cuestas que al hombro... Cuando se dice solo una verdad a medias suele convertirse en una mentira completa, y nuestros políticos son virtuosos en tal arte... Lo malo es cuando contagian a la ciudadanía...

Un transeúnte vino esperanzado y engañado creyendo que esto es la meca del trabajo – eso mismo le habían asegurado – que aquí el campo da para ganarse unos euros a todo el que llegue… hasta los negros y los moros. Y él, que no es moro ni negro, pero que se había dejado a 300 kms. una mujer con dos críos a los que no podía dar de comer porque ya no tenía paro, ni ayuda familiar, ni ná de ná, que es de los del 30% esa de pobreza severa de este país, ahora está aquí solo, sin trabajo y sin poder regresar a pasar su hambre con los suyos, al menos… Me dice (yo no lo sabía) que el sistema de ayuda que existía cuando un servidor servía en Cáritas, junto con el Ayuntamiento, ya no existe. No hay presupuesto, le habían dicho

            Una pobre mujer, muy mayor, en situación muy próxima a la incapacidad, malviviendo en una casa vieja que se cae a pedazos como ella misma y sobre ella misma, con una miserable paga que apenas le llega para mantener su pobreza, clama por recibir una asistencia doméstica que le ayude en lo más básico, mientras se produce el milagro de que la envíen a la residencia que tiene solicitada. No tiene padrinos, aunque la pobre cree que sí los tiene. Pero tampoco hay presupuesto para mandarle a nadie. Y se las apaña sola y con su andador…

            Otra, ésta joven, divorciada de un marido del que no ve un solo euro, solo trampas y disgustos, pues es un piula que no es suya ni la camiseta que lleva puesta y le da igual estar en la cárcel que en la calle, si bien mejor dentro que le dan de comer. Insolvente e irresponsable. Eso sí, a su madre, incapacitada, se la largó a su exmujer, que la cuida como si fuera propia. Igual que tiene a su cargo una hija con una minusvalía mental acusada, absolutamente dependiente de ella, a la que tiene que llevar y traer a las ong´s que le echan una mano. No tiene paga de dependencias alguna a pesar de tener dos dependientes a su cargo. Y no puede acceder a ningún trabajo con tales condicionantes. Pide ayuda a los servicios sociales competentes y correspondientes… No hay presupuesto, o eso le dicen.

            Estas tres historias son ciertas y verdaderas. Al menos, no hace mucho, lo eran. Existen. Forman parte de nuestra realidad cotidiana. Como imagino que habrá otras, muchas o pocas, esturreadas por aquí y por allí. Pero aunque exista una sola. Aún me desbordan las orejas los ecos de los últimos carnavales, para los que, eso sí, ha habido presupuesto, por supuesto que sí hay presupuesto para cuantas fiestas pida el pueblo. Ahí está el bussilis de la cuestión, que si el pueblo no tiene sensibilidad ni solidaridad, ¿por qué ha de tenerlo los que han sido votados por él?.. Al pueblo que vota hay que darle lo que pide, y si su prioridad es el cohete y la murga…

            Y me da por pensar (aunque no sé si vale de algo) sobre lo que significa no haber, o no quedar, presupuesto. Porque de tales presupuestos cobra un ministro del tema, con toda su corte de directores generales y demás edecanes. Como de tal presupuesto cobran consejeros del tema y la misma cohorte. Y de tal presupuesto, si seguimos bajando en escala, cobran aquellos que le dicen al transeúnte desgraciado, o a la pobre vieja, o a esa triste mujer, que, mire usted, no hay presupuesto… Y cavilo si esos presupuestos no han de darse para ambas cosas y casos, no para uno sí y al otro no. O cual de ellas es la más prioritaria de ambas. O qué puñetas pasa cuando vive tanta gente de solucionar problemas que solo alcanzan hasta donde llega lo que alcanza el presupuesto, o lo que queda del presupuesto… En fin, un lío, al final, aunque sigo interrogándome a mí mismo si eso es lógico y de sentido común...

            Pero no me resulta natural en un país donde funciona como normal la máquina de fabricar diferencias sociales y económicas. Por ejemplo, una subida del 2% a los que más cobran (políticos) y una del 0,9% a los que menos (jubilados). O sea que pienso, y me pregunto, y me respondo a mí mismo, si no es precisamente lo que denuncia el Relator de la Onu en su informe sobre este país. La parte gorda para los administradores y la flaca para los administrados. Primero, los de arriba, luego, después, los de abajo, si queda presupuesto, claro… El resultado es el que es: que España es el país con mayor índice de desigualdad social y económica de toda Europa. Y, no solo no se reducen, si no que aumentan. Naturalmente, con tales criterios no se puede esperar otra cosa. Pero lo malo, lo peor de todo, es que lleguemos a considerar normal lo que no lo es.

            Recientemente hemos sido visitados por la Vicepresidenta y Consejera de la casa en la cosa, Isabel Franco. Del isabelyfernandismo reinante. A ver si se ve el detalle, al menos, de que empiece a haber presupuesto a partir de ahora. A ver si se nota.

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 6 Marzo: EVOLUCIÓN Y DECADENCIA

Si quiere recibir gratuita y diariamente estos escritos en casa, facilite en miguel@galindofi.com su e.mail, y les serán enviados.

En nuestra región, más de la tercera parte de sus municipios no tienen aún Plan Urbanístico, y van arreglándose tirando de normas subsidiarias. Resulta un poco vergonzoso. Mis considerados dos pueblos se regulan (o desregulan) así, de aquella forma y manera...

Un hijo tengo yo afectado por la norma más absurda, ilógica y esperpéntica que darse pueda. Y ahí sigue, jorobado por los años de los años hasta que algún probo funcionario de nuestra elefántica administración se le ocurra abrir los ojos...

Y me pregunto si las geniales meteduras de patas constructiva de nuestros municipios, que tanto afectan y causan daños cuando nos viene una dana, por ejemplo, se deben también a esta carencia. Tercermundismo en estado puro.

A Josep Borrell le ocurre un poco como a mí… Que es un incorrecto político (yo soy lo primero, no lo segundo) un tanto incontinente cuando toca guardarse las verdades para sí solo. Y el hombre no gana para disgustos. En mi caso es algo que asumo como natural, pues ya estoy emérito de muchas cosas y ya no se me puede – como antes – chantajear con mi plato de lentejas autónomas… Ahora, me digo, que me embarguen los pavos… Pero en su caso, no. Él está encaramado en la lera de Europa, y ningún colectivo, interesado casi siempre, le perdona su sinceridad e integridad. Aunque sea una incuestionable verdad lo que dice.

            Y una de las cosas que últimamente ha soltado respecto a la concienciación de la sociedad en cuanto a lo del cambio climático, es que nos fijemos menos en lo que su cambio ha de ser gradual en el campo de la producción y el trabajo, y no drástico, para que no produzca paro y pobreza, que sí, que también, y que nos fijemos más en nuestros cambios personales y nuestros propios comportamientos diarios, que esos sí que tienen que ser drásticos, a la hora de gastar y comportarnos en nuestros hábitos sociales… y pone como ejemplo a los tan comprometidos jóvenes, por el ruido que hacen, que a ver – así mismo lo dice – “si están dispuestos a rebajar su nivel y su sistema de vida para asumir el coste que supone, y supondrá, atajar el cambio climático”…

            Ahí le han dado. Don Josep ha dicho exactamente lo mismo que yo escribo repetidamente: que cambiemos nuestros hábitos antes de exigir a los demás que cambien los suyos. Que aquí muchos alardear y pancartear, pero mucho festejar, y botellonear, y viajar… Que sí, que vale, pero que menos gritar y más actuar… La única diferencia es que yo lo largo a la sociedad en general y él lo focaliza en los jóvenes por lo de ruidoso que tiene la juventud. Pero es exactamente lo mismo. ¿De qué vale que yo recicle, si luego me monto un Friday?.. Así que, Sr. Borrell, a usted le dan las del pulpo por ser quien es y estar donde está – que se le oye mucho – y a mí solo me llevo algún que otro escupitajo, porque se me ve poco, muy poco. Pero por si le sirve de algo, oiga, que sí, que me siento totalmente identificado con lo que dice… Paqueosepa.

            Este fenómeno ya ha sido, cómo no, debidamente etiquetado. Se le empieza a llamar “El Síndrome de Greta”, fácil de imaginar el por qué, claro. Vale. Pero adviertan vuesas mercedes que mis abuelas ya hacían de su vida lo que hoy recomienda la Onu como imprescindible. Practicaban de manera innata y natural aquello que hoy se determina como indispensable: el método de las tres erres, Reducir-Reutilizar-Reciclar. Esto es, comprar estrictamente lo necesario; antes de tirarlo a la basura intentar arreglarlo, rescatarlo, reaprovecharlo y alargarle la vida en lo posible, previo a desecharlo reciclándolo…

            Pero los neo-apóstoles de lo verde solo atacan una parte en la lucha contra el cambio climático: la de la producción, no la del consumo. Mientras nos intentan vender (mejor, revender) la parte consumista que ya tenemos sólidamente anclada en nuestras costumbres, y que, precisamente es la que hay que cambiar por su contraria: la austeridad… Menos compra, menos basura, menos coche, menos fiestas, menos consumo superfluo… Pero no se nos exige que pasemos necesidad, eso es mentira, si no que prescindamos de lo innecesario, que no es lo mismo. Porque hemos hecho necesidad de la no-necesidad, y ahí está el error…

            Soy consciente que lo que digo y escribo es anatema para los intereses comerciales basados en un continuo y masivo consumismo. Y que es un enemigo tan poderoso como peligroso. Y que su estrategia para sobrevivir ahora es disfrazarse de verde y de impostado ecologismo, a fin de adormecer la conciencia del consumista, y que todo siga igual. Y que su fuerza la emplean en comprar políticos que sirvan estas tendencias con las que frenar y acallar las voces (pocas) que se levantan diciendo verdades como templos…

            …No la mía, naturalmente, que es la del piojo pegado a un grillo, pero sí la de personajes como Pepe Borrell, que padece hipos de la verdad con cierta frecuencia. No le auguro un largo futuro en su puesto. La ciudadanía gusta dormir su borrachera en almohadas de mentiras, y que les cuenten cuentos, y no quiere ser despertada de sus muy falsos y engañosos sueños…

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 6 Marzo: EVOLUCIÓN Y DECADENCIA

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Leído en la prensa de por aquí: Una de las redes del tanque de tormentas de San Javier, vierte al Mar Menor. El colector que discurre por la Ronda Poniente de La Ribera viene a desembocar pegadico a la Playa de Colón...

Otra más: Los Alcázares sigue esperando que la Comunidad (esa misma que se conduele en sus duelos marmeronenses) conecte el tanque de la localidad con la depuradora. Pregúntense, ¿a dónde vá a parar cuando rebasa?..

Pero seguimos generalizando en los vertidos agrícolas. Seguimos demonizando un único sector como única causa. Y esto ya huele tanto como los fondos pútridos de los que nos quejamos. Seamos justos por una vez...

https://youtu.be/_oTaN_isBq4

La mayor lección y la mejor formación sobre tolerancia sexual la aprendí en mi pueblo de nacimiento y crecimiento, de la sociedad donde me eduqué, ¡hace más de setenta años!.. en plena dictadura franquista, sí señores y señoras, cuando el pensamiento único se imponía con zarpa de hierro, y cuando lo mandado y ordenado era todo lo contrario a esa misma tolerancia que me enseñaron… aunque los contemporáneos y contemporáneas, servidores y servidoras actuales de otro tipo de pensamiento también dirigido no se lo crean… En ese pueblo mío, y en aquellos tiempos de plomo, había (imagino que como en todos los pueblos-pueblos de este país), gays y lesbianas entre nosotros. Cierto. Y sin embargo, nunca, jamás, ví ni viví por ningún lado, un comportamiento social de rechazo, ni de ataque, ni de discriminación alguna, hacia ellos… Más bien todo lo contrario, solo conocí un trato digno, respetuoso y respetable, e incluso de afecto y reconocimiento a los que lo merecían. Y todo eso de forma natural, de manera normal, sin ningún tipo de alharaca ni presunción de nada. Esa es/fué mi experiencia personal.

                Por eso me pierdo (e incluso me siento ciertamente incómodo) con la etiquetósis que hoy padecemos, y que parece invadir todos los rincones de la sociedad, y que, ¡cuidado!.. mucho ojo con el que no ose usarla y extenderla, porque entonces será reo de las peores acusaciones que el moralismo cartelero suele utilizar, para ponerte en la picota pública, colgarte el sambenito, y despeñarte desde el humilladero local, y que no vuelvas a ser admitido en el actual templo del buenismo. Me cuesta mucho trabajo entender una clasificación gran-hermánica y disectiva como la actual: lesbianas, gays, transexuales, bisexuales, intersexuales, familias parentales, monoparentales, homoparentales, eteroparentales… en vez de una aceptación insertiva y aceptiva, única y simple, elemental y natural, como hacíamos entonces en mi pueblo.

                Precisamente, en pueblo llano a eso se la llama “no hacer distingos”, y el etiquetismo, por el contrario, es distinguirlos del resto etiquetándolos. En vez de integrarlos los distinguimos, que es justo el revés de la moneda. Como distintos zánganos de una misma colmena, como especies diferentes de un mismo género humano. Y para hacer aún mayor el distingo, montamos fiestas diferenciales, por y para eso mismo, para diferenciarse del resto… y se proclama a voz en grito (y pobre del que contradiga el sacro principio) que eso se hace justamente para lograr una integración plena en la sociedad – nada más opuesto – y a ver, para que yo, pobre de mí, lo entienda: ¿lo que me dicen es que para integrarnos vamos a diferenciarnos, para unirnos vamos a clasificarnos en tendencias separadas?… Desde luego, no encuentro mucha congruencia en ello. Y, además, se hace con espectáculos donde esa diferencia se marca hasta la parodia, y se lleva hasta el patetismo más ridículo, en un paroxismo que empieza, como aquel principio de física, a provocar una fuerza igual de proporcional, desarrollada en sentido contrario. Y más cuando estas demostraciones han sido institucionalizadas a extremos poco defendibles, por no decir poco razonables…

                A ver, tal y como se ha tratado este fenómeno… (y no vayan a interpretar maliciosamente la definición de fenómeno, que me los veo, y me las veo, venir) es que algo que debería entenderse tan   normal y natural como la propia vida, ha sido convertido en fenómeno, puesto que esas manifestaciones autoexcluyentes y fuera de tono, precisamente se afirman y reafirman a sí mismas como tal fenomenología.

                Tal y como ha sido esto tratado, repito, lo que se ha conseguido es que aquella tolerancia básica, simple y natural, se haya convertido en una especie de carnaval donde se presume de la diferencialidad que se quiere combatir y no de la igualdad que se quiere conseguir. Y observo otra cosa más: se ha creado un campo de trabajo, nuevo y diferenciado, claro, del cual medra mucha gente… Donde antes todo se aceptaba sin más, tal cual, solo porque “así son las cosas”, hoy abundan cantidad de expertos, especialistas, psicologistas, mediadoristas y conocedoristas del asunto que viven de sus charlas, conferencias, informes, tratamientos, intervenciones y consideraciones varias, alrededor de las ubres del gran hermano estado… En pocas palabras, se ha creado una mercancía y ha aparecido su correspondiente mercado. No sé si habré sabido explicarlo, disculpen mi torpeza.

                Ahora ya solo queda contestarme que, o bien miento, o lo de mi pueblo fue algo tan raro, anómalo y extraño que, si es cierto que existió tal y como yo lo recuerdo y cuento, debió de ser un bulo de extraterrestres, y no una verdad, una certeza… Y que lo debo haber soñado porque nunca hubo un mundo así… Pues vale si así se empeñan y así se apañan. Pero más bien creo que la persecución y la discriminación quizá se diera mucho, muchísimo más, no lo sé, en las ciudades que en los pueblos. Y puede que se haya aventado un modelo ocultando el otro. Que se haya alzado una bandera de conveniencia negando y escondiendo otra de inconveniencia… O puede que no. Pero yo sí que pienso así.-

MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / El Mirador / www.escriburgo.com / viernes 10,30 h. http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php / próximo programa, día 6 Marzo: EVOLUCIÓN Y DECADENCIA

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